lunes, 4 de mayo de 2015

Temblores y erupciones volcánicas como fuente de combustibles
diarioecologia.com

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En vez de espantar a la gente, la energía que liberan terremotos y volcanes pronto podría echar a andar autos, lámparas y maquinarias.

Esto es especialmente cierto en las pequeñas islas del Caribe, que además de ostentar playas paradisíacas, cuentan con una recién descubierta fuente de energía subterránea que podría ser la gran respuesta al caro y poco sostenible consumo de combustibles fósiles.
Siete países del Caribe oriental tienen enorme potencial para la generación de energía geotérmica, que se puede confirmar con mayor exploración, según un estudio del Banco Mundial. Por ejemplo, en la isla de Guadalupe ya se han desarrollado recursos geotérmicos con la planta eléctrica La Bouillante, que genera 15 Megavatios (MW), lo suficiente como para satisfacer las necesidades de 64.000 hogares. Los recursos en esa región continúan inexplorados, pero los expertos sugieren que el potencial comercialmente explotable podría alcanzar los 850 MW.
Una vez desarrollada, esta energía podría ofrecer a las islas una fuente alternativa y a la vez limpia, económica y menos vulnerable a circunstancias inevitables como el cambio climático. Además, ofrecería un suministro energético confiable a un precio estable –una buena noticia para los usuarios caribeños, que cada fin de mes enfrentan, comparativamente, algunas de las facturas de luz más caras del mundo.
Hoy en día, el uso de la electricidad va de la mano del desarrollo, pero en muchas partes del Caribe y Centroamérica el acceso a este servicio fundamental es cada vez más costoso por su dependencia del petróleo. Más del 90% de sus necesidades de energía primaria proviene de combustibles fósiles –un tercio por encima del promedio regional y el doble del promedio global.
La extracción de energía de los volcanes y los movimientos de la corteza terrestre ya se aplica con éxito en otras regiones, como Indonesia, pero también parece ser una alternativa viable en México y Nicaragua, donde ya se está aprovechando el vapor que surge de las entrañas de la tierra para generar electricidad.
Basta ver un géiser lanzar vapor a la atmósfera para tener una idea de la cantidad de energía que se esconde bajo nuestros pies. Las centrales geotérmicas utilizan las aguas subterráneas en constante ebullición por el calor del magma. El vapor de estas aguas impulsa sus turbinas que, a su vez, generan electricidad. Finalmente, el agua se inyecta de vuelta a la reserva acuífera para mantener vivo el ciclo.
Globalmente, el potencial para la energía geotérmica es más de 75 veces el consumo mundial de electricidad en 2011, según la Agencia Internacional de Energía. En promedio, cada latinoamericano consumía 2045.5 kwh de electricidad en 2010 según el Banco Mundial, casi 4 veces más que en África subsahariano pero apenas el 15% del consumo per cápita de Estados Unidos.

jueves, 30 de abril de 2015

El volumen de agua dulce de la Tierra es una diminuta esfera
medioambiente.org

La publicación de Toda el agua de la Tierra en una pequeña esfera ha despertado las dudas de muchos de vosotros sobre las dimensiones correctas de la ilustración.
Seguro que os sorprenderá mucho más esta otra imagen que muestra que parte del agua de la Tierra es dulce y accesible para el hombre.
La fuente es totalmente fiable: el Instituto Geológico y Minero de los E.E.U.U. Según este organismo la cantidad de agua dulce accesible para el hombre es únicamente un 0,007% del total, unos 93.000 kilómetros cúbicos de agua.
Para facilitar la comprensión de los tamaños. Si la Tierra es una pelota de baloncesto, el agua de la Tierra sería una pelota de ping pong (esfera blanca), y el agua dulce disponible para el hombre un grano de maíz (pequeña esfera azul dentro de la esfera blanca).




El 96,5% del agua de los océanos es salada. Otro 1% se encuentra en acuíferos y lagos salados.
El porcentaje de agua dulce sobre el total es de un 2,5%. De este porcentaje un 0,78% son aguas 
subterráneas que no se pueden extraer por la profundidad, un 1,71% están en forma de hielo en los 
casquetes y glaciares polares. Si restamos además el agua atmosférica, la que forma parte de los seres 
vivos y la de constitución de los suelos queda un exiguo 0,007% disponible para el hombre.
El agua dulce que podemos utilizar se encuentra en acuíferos, lagos y ríos principalmente.

Via: usgs.govnasa.gov
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miércoles, 29 de abril de 2015

Cambio climático amenaza a 62.3 millones de habitantes de islas
eluniversal.com.mx

De continuar las tendencias actuales, los niveles del mar se incrementarán hasta dos metros para finales del siglo. (Foto: Archivo EL UNIVERSAL )

El aumento en los niveles del mar podría causar que las pequeñas islas, que son naciones en desarrollo, sean inhabitables para el año 2100 
Los 62.3 millones de habitantes de los pequeños países insulares se encuentran bajo amenaza inminente debido al aumento en el nivel del mar provocado por el cambio climático, alertó hoy Naciones Unidas (ONU).
En mensajes con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, la ONU indicó que el aumento en los niveles del mar podría causar que laspequeñas islas, que son naciones en desarrollo, sean inhabitables para el año 2100.
Asentó que de continuar las tendencias actuales, los niveles del mar se incrementarán hasta dos metros para finales del siglo, lo que amenaza principalmente a las islas del océano Pacífico.
Achim Steiner, director ejecutivo del Programa de la ONU para el Ambiente (UNEP, por sus siglas en inglés) , advirtió que naciones como Kiribati, Maldivas, las islas Marshall y Tuvalu son especialmente vulnerables a los incrementos en los niveles del mar.
Mientras tanto, para las islas de la comunidad del Caribe el costo de los incrementos en los niveles del mar alcanzará los 187 mil millones de dólares para el año 2080, según Naciones Unidas.
Asimismo, un informe reciente del UNEP reportó que el aumento en los niveles del mar en los 52 pequeños Estados islas en el mundo es cuatro veces mayor al promedio global, y sigue siendo la mayor amenaza para su desarrollo ambiental y socioeconómico.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, manifestó que a pesar de su reducido tamaño, los pequeños Estados islas son grandes reservas de biodiversidad y albergan algunas de las especies de plantas y animales más importantes del planeta.
El titular de la ONU afirmó que esos Estados sólo generan 1% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero (GEI) y sin embargo son los más perjudicados por el cambio climático.
"Este año, urjo a todos a que piensen en la difícil situación de los pequeños Estados islas en desarrollo, y a que se inspiren en sus esfuerzos para abordar el cambio climático, fortalecer su resistencia y trabajar para un futuro sostenible", declaró Ban.

kal 

martes, 28 de abril de 2015

Nueva tecnología permite generar hidrógeno a partir de residuos de banano
diarioecologia.com

bananas diarioecologia

Las bananas son una fuente importante de ingresos para más de cien países. Pero por cada tonelada que se cosecha, se producen diez toneladas de desperdicios. Una investigación de la Universidad de Cuenca en Ecuador busca crear hidrógeno a partir de los residuos de la fruta.
El proyecto consiste en optimizar la biomasa proveniente de los residuos de las plantas de banano sometiéndolos en agua a una temperatura supercrítica, es decir a temperaturas mayores a los 374 grados Celsius y a una presión mayor a los 22,1 mega pascales y luego estos residuos pasan a través de un catalizador que permitirá gasificar el hidrógeno.
La importancia del hidrógeno radica en la versatilidad de este elemento como medio de almacenamiento y transporte de energía.
La obtención de hidrógeno significa la generación del producto energético del futuro, que reemplazará los combustibles provenientes del contaminante petroleo responsable del cambio climatico y el calentamiento global.
Generar fuentes ilimitadas de energía, dando valor agregado a los recursos naturales, es un gran aporte para el cambio de la matriz productiva de cualquier pais.
No es la primera vez que investigadores desarrollan tecnicas para obtener combustible a partir de los residuos de banano, por ejemplo investigadores ingleses proponen usarlo como sustituto de la madera.

lunes, 27 de abril de 2015

Hay 40 volcanes activos entre Argentina y Chile y explotan cada vez más seguido
Mariana Iglesias
clarin.com

Las razones científicas de la erupción del Calbuco.Sólo desde 2010 se registraron cinco erupciones que afectaron a la Patagonia. Dicen que falta monitoreo.

Es difícil hablar de nacionalidad en materia de volcanes, pero entre Argentina y Chile hay unos 40 que están activos. La mayoría están siendo monitoreados por los chilenos. Su control es la única manera de predecir erupciones, aunque a veces las señales se dan al unísono con el evento. En los últimos cinco años hubo cinco grandes erupciones, lo que da la idea de un aumento en la frecuencia. Algunos especialistas dicen que se relaciona con el terromoto de Chile de 2010.
Ese año, el 27 de febrero, hubo  un terremoto de magnitud 8,8 que dejó 524 muertos, 25 desaparecidos y dos millones de damnificados. “Está prácticamente probada la ligazón entre los grandes terremotos y las posteriores erupciones de volcanes. Después del terremoto de Chile erupcionaron el Peteroa, el Puyehue, el Copahue, el Villarrica y el Calbuco”, explica Andrés Folguera, doctor en Ciencias Geológicas e investigador del Conicet.
Alberto Caselli, director del Laboratorio de Estudio y segumiento de volcanes activos de la Universidad Nacional de Río Negro, agrega: “Hay una relación entre los grandes terremotos y las erupciones volcánicas. Hubo un terremoto en 2010 de gran magnitud y muchas de estas erupciones estarían posiblemente vinculadas a eso”.
Patricia Sruoga, volcanóloga e investigadora del Conicet, opina que “la relación entre terremotos y actividad volcánica asociada es materia de discusión científica. Hay casos que avalan esa relación, pero otros no. La liberación de energía que se produce en un terremoto tectónico puede desestabilizar un sistema magmático, pero no necesariamente”.
Los tres especialistas acuerdan en que habría una intensificación de la actividad volcánica en los últimos tiempos, pero dicen que para sostenerlo más habría que tomar un registro histórico más prolongado, ya que “la vida de los volcanes es mucho más larga que la efímera vida humana”.
Cuando se habla de volcanes activos significa que tuvieron alguna erupción en los últimos 10.000 años. Los importante es monitorearlos para predecir erupciones.
“Cada volcán tiene un comportamiento particular. Puede tener una erupción cada 500 años o cada mes, depende de la composición de lava y cenizas. Algunos tienen composiciones viscosas que taponan los cráteres. Esos tienen erupciones más esporádicas, pero son mucho más fuertes”, explica Folguera. El especialista detalla las tres técnicas que existen para monitorear volcanes: a través de sismógrafos, midiendo aguas termales de las laderas y, la más elaborada, la interferometría de radar (un satélite mide el relieve del volcán y ve si está “inflado”). “Si bien hubo muchos avances, esto no ocurre en Argentina. Falta inversión y que las distintas instituciones se unan en planes nacionales comunes”, dice.
“No se puede hablar de nacionalidad de volcanes porque las fronteras son políticas y no geológicas y varios volcanes son mitad argentino-mitad chileno. Como se vio en las últimas erupciones, los volcanes de Chile provocaron lluvias de ceniza en amplias zonas de nuestro país. Por eso, la discriminación entre argentino o chileno es irrelevante a la hora de elaborar planes de prevención”, explica Sruoga. Para la experta, “Chile afrontó el problema del riesgo volcánico como una cuestión de Estado. En Argentina las cosas están lejos de ser así. Los recursos son escasos. Urge contar con un inventario completo de centros eruptivos, incluyendo los sospechosamente activos. Y desarrollar un programa de monitoreo a largo plazo. Hubo varias iniciativas auspiciosas por parte de organismos nacionales y provinciales, pero resultan insuficientes”.
Caselli dice lo mismo, que “en Argentina no se está monitoreando” y que “todo lo hace Chile”. Habla de algunas intenciones e ideas, como armar un Observatorio Piloto desde la Universidad de Río Negro mediante un acuerdo con el gobierno de Neuquén, pero asegura lo mismo que sus colegas: “Todavía faltan recursos”.

viernes, 24 de abril de 2015

ALERTA CIENTÍFICA

Los pesticidas sistémicos: una amenaza global a los sistemas vivos
estrelladigital.es

Los insecticidas más usados del planeta representan una grave "amenaza global para la diversidad biológica", según un demoledor informe conocido estos días y realizado por un grupo de trabajo de la Unión Internacional para la Defensa de la Naturaleza (UICN)
Una mariposa se posa en una flor. | Carlos de Prada
El informe no es uno de tantos como han venido publicándose sobre la cuestión. Es un amplio estudio que, basándose en los hallazgos de más de 800 investigaciones científicas que han sido evaluadas a lo largo de varios años, ha llevado a los 53 científicos internacionales que lo han realizado a muy preocupantes conclusiones acerca de las consecuencias del uso masivo de unos insecticidas muy utilizados, los insecticidas sistémicos (como los llamados neonicotinoides y el fipronil).
Probablemente, a mucha gente no le digan mucho nombres como este de los neonicotinoides. Pero los neonicotinoides son  rociados, año a año, sobre cientos de millones de hectáreas de los campos de cultivo de nuestro planeta y, por ello, sus efectos negativos pueden ser globales. El 40% de todos los insecticidas que se esparcen por la superficie agraria planetaria son neonicotinoides. En España, por ejemplo, son vastamente usados, no solo en zonas agrícolas sino también, aunque en mucha menor medida, en poblaciones.
Las conclusiones del informe aludido, respecto a unas sustancias que contaminan tan amplias regiones pueden tener, pues, hondas implicaciones. Y son unas conclusiones que, por lo vasto de sus bases de apoyo, tienen un peso mucho mayor que el de los meros estudios concretos que van publicándose de cuando en cuando. Como se ha hecho público "el grupo de trabajo sobre pesticidas sistémicos es la respuesta de la comunidad científica sobre el impacto de estos venenos sobre la biodiversidad y los ecosistemas y su intención es aportar la definitiva visión de la ciencia para informar una más rápida y mejor toma de decisiones".
Los neonicotinoides y el fipronil amenazan el funcionamiento y los servicios de los ecosistemas
Por ello, han de tenerse muy en cuenta sus alarmantes conclusiones y el hecho de que, ante ellas, sus autores hayan pedido a las agencias reguladoras que apliquen principios más precautorios. Que vayan más allá estableciendo regulaciones más severas sobre los neonicotinoides y el fipronil y que comiencen a planificar unaretirada global o al menos a elaborar planes para una fuerte reducción en su escala global de usoDebe reconsiderarse, dicen, el actual uso a gran escala de estos productos, que consideran insostenible. Y motivos no les faltan, como se ve en los argumentos que desgranan.
Los datos del informe, que será publicado en breve en la revista científica Environmental Science and Pollution Research, muestran con contundencia que hay razones sobradas para preocuparse ya queelementos básicos para el funcionamiento de los ecosistemas estarían siendo alterados por estos venenos. Tal y como ha manifestado Maarten Bijleveld van Lexmond que lidera el grupo de trabajo que ha realizado la investigación, "los hallazgos son gravemente preocupantes, vemos ahora claramente que los neonicotinoides y el fipronil amenazan el funcionamiento y los servicios de los ecosistemas mucho más allá de las preocupaciones acerca de especies concretas y que deben garantizarse una atención por parte de los gobiernos y de la regulación".
Lo denunciado ahora va mucho más allá del que hasta ahora ha sido el tema "estrella": las abejas, sin quitar importancia a lo que sucede con estos himenópteros que, ya por sí solo, debería justificar acciones internacionales de hondo calado, más allá de las tibias y parciales que ha acometido la Comisión Europea. 
Por supuesto, este informe también se ocupa del problema de las abejas, reafirmando la gravedad del problema. Incluso incrementando la contundencia de los datos, ya que lo que este informe dice sobre las abejas se basa en la revisión de toda la literatura científica existente. Habla de hechos muy preocupantes como que las concentraciones de neonicotinoides que se encuentran en las áreas tratadas con ellos, en los escenarios reales,  pueden dañar la capacidad de navegación de los individuos, su capacidad de aprendizaje, su búsqueda de alimento, su longevidad, su resistencia a las enfermedades (singularmente importante esto cuando se sabe que las abejas están siendo minadas por ellas) y su fecundidad. También se muestra contundente en su preocupación por especies como los abejorros ante los irrefutables efectos que se han visto en ellos a nivel de colonias. Colonias de abejorros expuestas a estos neurotóxicos que veían ralentizado su crecimiento y producían muchas menos reinas (lo que en los abejorros puede ser especialmente grave).
Los autores del informe dicen, sí, que estamos ante algo que "está poniendo en serio riesgo a las abejas melíferas" pero también a "otros polinizadores tales como las mariposas y a una amplia gama de otros invertebrados como las lombrices de tierra y a vertebrados como las aves". Añadiendo que "la evidencia es muy clara, Estamos asistiendo a una amenaza a la productividad de nuestro medio ambiente natural y agrario equivalente a la que han representado los organofosforados o el DDT", según expresa Jean-Marc Bonmatin del National Centre for Scientific Research en Francia, uno de los principales autores del estudio. "Lejos de proteger la producción de alimentos, el uso de pesticidas neonicotinoides está amenazando  la infraestructura misma que la hace posible, poniendo en peligro a los polinizadores, la trama básica de los hábitats y los organismos que mantienen a raya las plagas de manera natural en el corazón mismo del funcionamiento de un ecosistema", añade.
Los neonicotinoides  fueron presentados en su día como unos insecticidas más "ecológicos" y autorizados
El análisis realizado por estos científicos desvela que los grupos de especies más afectados son invertebrados terrestres como laslombrices que se exponen a altos niveles de estos venenos a través del suelo o las plantas, a niveles medianos a través del agua superficial y de lo que desprenden las plantas y a bajos niveles a través del aire, por el polvo. Individuos y poblaciones pueden verse negativamente afectados incluso a niveles bajos y por la exposición aguda. Ello los hace altamente vulnerables a los niveles de neonicotinoides asociados a su uso agrícola"
"El siguiente grupo más afectado"- dicen estos expertos afiliados a la UICN- "son los insectos polinizadores, tales como las abejas y lasmariposas que están expuestos a una alta contaminación a través del aire y las plantas y a una exposición media por el agua. Individuos y poblaciones pueden ser afectados por exposiciones bajas o agudas haciéndoles muy vulnerables". Entre otras cosas, el informe destaca que los polinizadores expuestos a polen, néctar o agua contaminada son dañados a las concentraciones de estos venenos que suelen darse realmente en los campos.  
A continuación, seguirían los invertebrados acuáticos tales como los caracoles y las pulgas de agua, que son vulnerables a diversos grados de concentración de estos venenos, desde los bajos a los más altos, y que pueden ser afectados a nivel de individuos, poblaciones y comunidades enteras. Se ha constatado, por ejemplo, que en lugares contaminados con estos productos se ha reducido muy notablemente la diversidad y abundancia de insectos acuáticos.
Para gente desconocedora de cómo funciona la naturaleza de la que el ser humano depende, para bien o para mal, el que se vean afectadas criaturas como las descritas puede parecer algo no demasiado importante. Sin embargo, se trata de criaturas que muchas veces desempeñan funciones esenciales para la conservación de la fertilidad de las tierras, para la producción de frutos y semillas importantes para la alimentación humana, para el mantenimiento del equilibrio de los ecosistemas acuáticos,... Criaturas que muchas veces están en la base de ése delicado castillo de naipes de la trama viviente de la que el propio hombre forma parte.
La gran escala a la que los seres vivos pueden verse expuestos a estos venenos en el medio ambiente global, a niveles de concentración que se sabe que pueden causar efectos letales y sub-letales en una amplia gama de beneficiosos microorganismos, invertebrados y vertebrados terrestres, acuáticos y del suelo, pone en riesgo, nos dicen estos expertos,  el funcionamiento de los ecosistemas y los servicios que nos brindan. Entre ellos los que brindan ecosistemas terrestres y acuáticos relacionados con la descomposición de los residuos y el ciclo de los nutrientes, la producción de alimentos, el control biológico de las plagas,  o la polinización, cuyos valores económicos son exorbitados.
Ciertas especies de invertebrados del suelo, tales como las lombrices, a pesar de su humilde apariencia, pueden proporcionar servicios inestimables ligados a cosas como la regulación de los nutrientes del suelo, el depósito de carbono, apoyar el crecimiento de las plantas, etc. Por ello no es cosa de broma que, como se comenta en el informe, se hayan visto en ellas efectos que van desde la simple muerte de las mismas , a reducción de su actividad trófica, pasando por alteraciones de conducta. El suelo es, por sí mismo, un ente vivo cuyo equilibrio depende  de la diversidad de las complejas comunidades biológicas que lo habitan.
El informe detalla cómo se ha visto que los microorganismos del suelo, absolutamente fundamentales para que este reúna unas mínimas condiciones, pueden verse afectados, bien sea por exposiciones a niveles altos o más bajas pero prolongadas. Por otro lado, también apunta que las muestras tomadas en el agua en diversos puntos del planeta han mostrado que de manera regular se exceden los límites ecotoxicológicos. Y que además de contaminar a especies no objetivo, frecuentemente beneficiosas, a través de la exposición directa (por ejemplo insectos que consumen el néctar de plantas tratadas), estas sustancias son también detectadas en concentraciones variables fuera de las zonas donde se usaron. La solubilidad en agua de los neonicotinoides implica que pueden ser transportados  y contaminar áreas más extensas originando exposición a los mismos de seres vivos en lugares como cursos fluviales, estuarios y ecosistemas costeros.
El informe -aparte de referirse a otros animales como peces o anfibios- no olvida tampoco aludir a los efectos que se pueden causar, por ejemplo, en vertebrados como las aves (que pueden verse afectadas por alimentarse de semillas recubiertas con estos insecticidas) o incluso los reptiles cuyas poblaciones han caído en algunas zonas a la vez lo hacían las de los insectos de los que se alimentaban.
Los efectos de la exposición a los neonicotinoides tienen una amplia escala, que va desde los efectos inmediatos y letales a los efectos crónicos
Como se ve, el panorama que dibuja el informe va mucho más allá del ya de por sí grave asunto de las abejas, insectos que desempeñan un papel clave en la ecología y aún en la economía agraria (muchos cultivos importantes dependen de la polinización), a pesar de lo cual no se han conseguido en su defensa, a nivel político, más que algunos paños calientes como las tímidas acciones emprendidas por la Comisión Europea, que ha acometido restricciones muy parciales que afectan a algunos pesticidas.
Los neonicotinoides empezaron a usarse a gran escala en la agricultura en los años 90 y fueron presentados en su día como unos insecticidas más "ecológicos" y autorizados, como casi siempre suele suceder, basándose en estudios realizados o financiados por las propias industrias que los venden y que defendían sus virtudes, su "inocuidad"... Sin embargo, la ciencia no dirigida por los fabricantes de pesticidas, la ciencia independiente de numerosas universidades y centros de investigación repartidos por todo el mundo, a menudo con financiación pública, ha ido acumulando datos, que muestran un escenario muy diferente. Datos que ahora ha reunido el informe referido, bautizado como The Worldwide Integrated Assestment of the Effects of Systemic Pesticides on Biodiversity and Ecosystems (WIA), en castellano: Evaluación Integrada Global  de los Efectos de los Pesticidas Sistémicos sobre la Biodiversidad y los Ecosistemas, realizado con afán de guiar unas acciones políticas que estén a la altura de la amenaza.
El gran mérito del trabajo hecho por estos expertos es que pone junto, por primera vez, todo el peso de la evidencia científica existente, de modo que permite hacerse una idea del monumental alcance de la cuestión. Pero, teniendo en cuenta que no son los únicos pesticidas que se están usando en tantas y tantas zonas, y que se sabe que pueden tener efectos semejantes, ello debiera acaso impresionarnos todavía más, en el sentido de que los daños reales que se están produciendo pueden estar siendo subestimados en alguna medida incluso por este informe.
La cosa, pues, es mucho peor que lo que las campanas que mucha  gente de a pie ha venido escuchando hasta ahora. Y este informe debería convertirse en un fuerte aldabonazo sobre la conciencia de los gobernantes, cosa que está por ver que llegue a pasar.
Los pesticidas investigados recubren las propias semillas que son esparcidas por los campos y una vez que estas arraigan pasan al interior de todo el vegetal a medida que este crece. Ésa es la razón de llamarlos sistémicos, el que estos venenos se reparten por todo el organismo vegetal, por todo su sistema vital a fin de envenenar al animal que se lo coma. Aunque a veces también puede aplicarse externamente. Entre los pesticidas sistémicos se encuentran algunos como el acetamiprid, clothianidin, dinotefuran,  imidacloprid, nitenpyram, nithiazine, thiacloprid, thiamethoxam o fipronil (este último no es un neonicotinoide sino un fenilpirazol). Nombrecitos que dicen poco a la gran mayoría de los mortales a pesar de la inquietud científica que generan.
Esta revisión de estudios que condensa lo que dicen centenares de investigaciones dispersas, pocas de las cuales habían llegado a tener una suficiente difusión entre la sociedad. Hasta ahora, lo más normal es que se fuesen conociendo estudios que mostraban, cada uno, un efecto sobre una especie, un tipo de ecosistema o un lugar. Por ejemplo, un estudio sobre las abejas en Francia, un estudio sobre lo que estaba pasando con los ecosistemas acuáticos en Holanda u otro sobre las aves en Estados Unidos, pero sin que hubiese tantos que mostrasen efectos más amplios sobre la biodiversidad o los ecosistemas. Y este estudio ahora conocido sirve para acercar un poco a ésa visión de conjunto, mucho más pavorosa que la que sugieren las piezas aisladas del puzzle. El escenario mostrado va mucho más allá de los impactos sobre especies concretas o grupos, y alcanza los efectos a nivel de comunidades enteras de seres vivos y de procesos ecosistémicos que se están viendo dañados por estos pesticidas. Y los daños descritos son impresionantes.
Además de las cosas ya citadas, el informe destaca el carácter persistente de los neonicotinoides, capaces de perdurar sobre todo en los suelos, durante meses e incluso años en algunos casos. Ello incrementaría sus posibilidades de causar efectos tóxicos al aumentar la duración de la exposición a estas sustancias por parte de especies no objetivo (es decir, aquellas que no son consideradas plaga y que muchas veces son especies beneficiosas e incluso claves para el equilibrio de los ecosistemas).
Los neonicotinoides pueden afectar a especies que coman las plantas, sorban su savia, beban su néctar coman su polen o sus frutos
Además, al entrar en contacto con la naturaleza, los neonicotinoides sufren transformaciones químicas descomponiéndose en sustancias diferentes, que se denominan metabolitos, que pueden ser tan tóxicos o más que los productos iniciales.
Por si fuese poco, los métodos convencionales que se han venido usando para evaluar la toxicidad de los pesticidas neonicotinoides y otros pesticidas, basados en estudios de laboratorio a corto plazo no son, según estos investigadores, eficaces para medir el efecto real de estos venenos agrarios. La tendencia machacona de los test que se hacen para autorizar estos productos químicos que se basan más en evaluar riesgos de toxicidad aguda que en hacerlo con los efectos a largo plazo derivados de exponerse además a estos productos a través de diferentes vías de exposición, es algo realmente preocupante.
Se habla de unos productos que, solo por hablar de los efectos agudos, pueden ser, en el caso de algunos neonicotinoides, de 5.000 a 10.000 veces más tóxicos para las abejas que el DDT, según los autores del estudio.
Los efectos de la exposición a los neonicotinoides, nos dicen, tienen una amplia escala, que va desde los efectos inmediatos y letales a los efectos crónicos. Una exposición a largo plazo a niveles muy bajos, sub-letales, puede causar importantes desarreglos a diferentes niveles, frecuentemente por su carácter de venenos nerviosos.
Los neonicotinoides pueden afectar a especies que coman las plantas, sorban su savia, beban su néctar coman su polen o sus frutos, y la sucesión de efectos que causan pueden debilitar la estabilidad de los ecosistemas.
Su persistencia y solubilidad en agua ha generado una contaminación a gran escala, y con un importante potencial de acumulación, en los suelos y sedimentos, en las aguas subterráneas y superficiales y en la vegetación tratada con ellos y en la no tratada.
Además de la contaminación de las especies no objetivo por exposición directa (como por ejemplo la de insectos que consumen néctar de plantas tratadas), estos venenos son también detectados , según los investigadores, a concentraciones diversas fuera de las áreas tratadas. Pasan fácilmente al suelo y a los hábitats acuáticos de los alrededores de las áreas cultivadas. El agua contaminada con ellos junto con el polvo creado durante la siembra de las semillas tratadas puede contaminar las plantas silvestres que crecen en los márgenes de los cultivos y los setos pudiendo causar más potenciales efectos sobre una amplia gama de especies de invertebrados herbívoros que viven en o cerca de las zonas tratadas. A través de vías como estas se dan múltiples formas de exposición aguda o crónica por parte de las especies no objetivo, comentan los responsables de la evaluación sobre los efectos de estos pesticidas.
Finalmente, los científicos autores del informe, dicen que casi tan preocupante como lo que se sabe de los neonicotinoides es lo que se desconoce de ellos. Por ejemplo, la escasa información existente acerca de las cantidades que son aplicados y el poco seguimiento que se hace de sus concentraciones en infinidad de lugares donde son aplicados (aunque en los lugares en los que se analiza su posible presencia suelen ser detectados), la enorme cantidad de especies que queda por evaluar (por ejemplo, solo se ha evaluado la toxicidad para 4 especies de abejas de las cerca de 25.000 existentes, y queda mucho por estudiar sobre otros grupos como las mariposas o los sírfidos, también llamados moscas de las flores), también queda mucho por saber acerca de la toxicidad para ciertos vertebrados (desde pequeños mamíferos a algunas aves que pueden comer los granos envenenados), etc. En resumen, que los efectos reales, aún por estudiar, pueden ser mucho mayores incluso que los ya conocidos.
¿Adoptará medidas la comunidad internacional?

jueves, 23 de abril de 2015

Entró en erupción un volcán chileno y la ceniza llegó al Sur
clarin.com
Hay temor en Bariloche, donde ya suspendieron los vuelos y las clases

Villa La Angostura y San Martín de los Andes ya sufren con el Calbuco. En 2011, el Puyehue causó daños terribles. Esta madrugada, erupcionó por segunda vez.
Así fue la segunda erupción del volcán Calbuco esta madrugada, pasada la 1.15. / AFP
Otra vez un volcán chileno provoca pánico en las ciudades de la Cordillera. Ayer, cerca de las 18, entró en erupción el Calbuco, ubicado a 70 kilómetros de Bariloche. La boca del volcán expulsó toneladas de material que se tradujo en una columna de 10 kilómetros de altura que comenzó a llegar a la Argentina pasadas las 19. Las primeras cenizas cayeron pasadas las 23.30 a Villa La Angostura y San Martín de los Andes --el lago Lacar estaba cubierto de blanco--. Se trata de una muy fina capa de polvo volcánico que por ahora difiere en su consistencia de la ceniza caída en el 2011 cuando entró en actividad el Puyehue y se hacía incómodo respirar sin barbijo.
Pasada la 1.30 esta madrugada, se registró el segundo proceso eruptivo en el volcán Calbuco. El cráter lanzó una inmensa bocanada de cenizas e iluminó el cielo con una espectacular llamarada fogosa. Los rayos sobre la cima del monte, producto del roce entre la columna de cenizas y el aire, completaron el cuadro infernal.
A través de Twitter, el Servicio Nacional de Geología y Minería de Chile confirmó la segunda erupción del Cabulco e informó que se trata de un evento más enérgico que el primero. 
Las autoridades de la villa convocaron a un Comité de Emergencia que trabajó en la anterior erupción, con el fin de prepararse para un escenario aun más complejo.
Aconsejan mantener en los hogares los elementos básicos para estos casos: barbijo, agua y velas. Se esperaba que pasada la media noche las cenizas también se hicieran presentes en Bariloche, donde la población permanecía en alerta.
En muchos de los negocios de la ciudad rionegrina se habían acabado las aguas minerales y los barbijos. También algunas estaciones de servicio se quedaron sin combustible después de que cientos de coches acudieron a llenar sus tanques ante el temor de que se cerrarán las rutas.
Horas antes, la intendenta de Bariloche, María Eugenia Martini, había anunciado la suspensión de los vuelos y de las clases. En Chile, en tanto, ya habían declarado la alerta roja y evacuado a 1.500 personas.
En la memoria de la gente permanece intacta la experiencia de las cenizas del volcán Puyehue en 2011 que cubrieron la ciudad durante meses. Ayer, decenas de vecinos observaban, entre la curiosidad y el pánico, desde distintos puntos de la ciudad, el avance de una nube oscura y densa proveniente del Calbuco. Un impresionante hongo compuesto de humo, piedras y cenizas se levantó a lo lejos con inusitada fuerza. Los barilochenses ya saben de estos menesteres. El 4 de junio del 2011, a las 16.30, el Puyehue dejó a oscuras la ciudad como si alguien hubiera apagado el sol. Por eso, esta vez no dudaron en aprovisionarse. “¿Estás segura de que no va a pasar nada?”, le decía una vecina a la dependienta de un pequeño mercado en el kilómetro 5. “Nada, nada”, le respondía ella acariciándole el pelo. La región aún no se recupera ni económica ni emocionalmente del Puyehue.
El Calbuco tiene 2.015 metros de altitud y llevaba 43 años inactivo. Su última emisión de cenizas data de agosto de 1972. Está ubicado junto al lago Llanquihue y en la llamada Región de los Lagos chilena, una de las más turísticas del país.
Ayer, poco después de la primera erupción, el Servicio Nacional de Geología y Minería declaró la alerta roja porque la actividad volcánica representaba un serio peligro para la población. Más tarde, el gobierno de Michelle Bachelet decidió evacuar todas las localidades ubicadas a 20 kilómetros del volcán.