miércoles, 27 de agosto de 2014

La carne de ave será la de mayor consumo en la próxima década
avicultura.com
consumo pollo
Según el informe que ha elaborado la OCDE y la FAO  Perspectivas Agrícolas OCDE-FAO 2014-2023 los cambios que se están produciendo en el mundo, entre ellos una población cada vez mayor- requerirán una expansión sustancial de la producción en la próxima década. Lideradas por Asia y América Latina, las regiones en desarrollo serán responsables de más del 75 por ciento de la producción agrícola adicional durante la próxima década. Hay además dos conclusiones positivas para nuestro sector: que los precios relacionados con los cereales disminuirán durante al menos los próximos dos años y que la avicultura seguramente superará a la carne de cerdo y se convertirá en el producto cárnico de mayor consumo en los próximos 10 años.
Al presentar el informe, en Roma, el secretario general de la OCDE Ángel Gurría aseguró que: “los mercados agrícolas están recuperando condiciones más estables después de un período de precios inusualmente altos. Esto se ha visto favorecido por reacciones proteccionistas más moderadas de los gobiernos. Pero no podemos considerarnos satisfechos”.  El Director General de la FAO, José Graziano da Silva, señaló por su parte que: “Este año el mensaje del informe es más positivo. Los agricultores reaccionaron muy rápidamente a los altos precios y aumentaron su producción, de forma que ahora también tenemos más disponibilidad. Prevemos que los precios relacionados con los cereales disminuirán durante al menos los próximos dos años. El panorama es diferente para la carne y el pescado, ya que nos enfrentamos a una demanda creciente”.
Perspectivas Agrícolas prevé que producción mundial de cereales sea un 15 por ciento más elevada para 2023 que en el período 2011-13. El crecimiento más rápido de la producción se espera en las semillas oleaginosas, con un 26 por ciento durante los próximos 10 años. La expansión de la producción de cereales secundarios y oleaginosas se verá impulsada por la fuerte demanda de biocombustibles, en particular en los países desarrollados, y la creciente demanda de piensos en las regiones en desarrollo.