martes, 29 de marzo de 2016

La Gran Barrera de Coral, más amenazada de lo esperado
larazon.es


La Gran Barrera de Coral, más amenazada de lo esperado
Las autoridades australianas elevaron el nivel de amenaza por el blanqueo de corales en la Gran Barrera, tras detectar una pérdida extendida de estos organismos en el norte de este espacio natural, su zona más impoluta, informaron hoy medios locales.
«El blanqueo que estamos viendo en este momento en la Barrera es de gran preocupación y vuelve a enfatizar la necesidad urgente de reducir la emisión de gases invernadero», dijo hoy David Wachenfeld, jefe de científicos de la Autoridad del Parque Marino de la Gran Barrera de Coral, (GBRMPA, en inglés), a la cadena ABC.
La Gran Barrera de Coral, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, se extiende a lo largo de 2.300 kilómetros en el noreste de Australia y representa el mayor sistema coralino del mundo.

Según la GBRMPA, las zonas más afectadas por este blanqueo, que se ha agravado en las últimas dos semanas, se encuentran cerca de la isla Lizard, al norte de la ciudad de Cairns, y otros puntos del extremo norte de este ecosistema.
El blanqueo de corales, proceso en el cual pierden su color como resultado del estrés ambiental, responde en la Gran Barrera al aumento de la temperatura de la superficie del mar hasta los 33 grados centígrados en febrero.
Recientes datos de la NASA muestran que la temperatura media del planeta en febrero fue 1,35 grados más alta que su equivalente entre 1951 y 1980.
Durante el verano austral la temperatura del agua fue 2,5 grados por encima de la media y se prevé que en marzo se mantenga el calor, por lo que se teme un mayor deterioro de la salud de los corales a finales de este mes.

«Los expertos han alertado durante décadas sobre la necesidad de proteger los arrecifes coralinos reduciendo las emisiones de carbono, así que se trata de un toque de alerta para Australia y otros países», dijo hoy a ABC el coordinador del Comando Nacional contra el Blanqueo de Corales, Terry Hugues.
Los corales mantienen una relación simbiótica especial con unas algas microscópicas llamadas zooxanthallae, que proporcionan a sus anfitriones el oxígeno y una porción de los compuestos orgánicos que producen mediante la fotosíntesis.
Cuando están sometidos a estrés ambiental, muchos corales de arrecifes expulsan en masa sus zooxanthallae, y los pólipos del coral quedan sin pigmentación y aparecen casi transparentes sobre el esqueleto blanco del animal, en un fenómeno conocido como blanqueo.

La salud de la Gran Barrera, que alberga 400 tipos de coral, 1.500 especies de peces y 4.000 variedades de moluscos, comenzó a deteriorarse en la década de 1990 por el doble impacto del calentamiento del agua del mar y el aumento de su acidez por la mayor presencia de dióxido de carbono en la atmósfera. EFE