viernes, 8 de junio de 2018

Los árboles más altos y viejos resisten mejor las sequías en las selvas tropicales
tiempo.com

La altura y la edad de los árboles son muy importantes durante periodos de sequía en la Amazonia

Selva amazónica, donde se ha llevado a cabo la investigación sobre la resistencia a la sequía de los árboles, debido a la sensibilidad de su actividad fotosintética.


Así lo evidencia un estudio que acaba de publicarse en la revista ‘Nature Geoscience’, en el que se observa que los árboles más altos tienen mayor edad y son más resistentes a la sequía en los bosques tropicales. El trabajo lo ha llevado a cabo un equipo de científicos de Estados Unidos, Brasil y Australia.

El cambio climático está alterando la dinámica, la estructura y la función del Amazonas, un bioma profundamente conectado al ciclo del carbono de la Tierra. Las sequías severas en la Amazonia son una de las potenciales consecuencias del cambio climático global y podrían conducir a pérdidas forestales generalizadas. Pero hasta el momento, se desconocía qué papel jugaban los diferentes atributos de los árboles, como la altura, en la respuesta de los bosques a la sequía.

Para comprobarlo, Pierre Gentine, investigador de la Universidad de Columbia (Estados Unidos) y sus colegas, analizaron la sensibilidad de la fotosíntesis a la sequía en árboles altos y bajos de los bosques amazónicos. Los científicos evidenciaron que los árboles más altos –aquellos de más de 30 metros- son tres veces menos sensibles a la sequía que los árboles de menos de 20 metros.

Los investigadores, entre los que se encuentran científicos de la Universidad Estatal de Campinas (Brasil), concluyen que la altura del árbol puede jugar un papel tan importante como los niveles de precipitación en la regulación de la fotosíntesis para hacer frente a las variaciones climáticas.

“Nuestros hallazgos aportan luz sobre la respuesta de los bosques amazónicos al estrés hídrico, las sequías y el cambio climático”, aseguran los científicos, quienes también descubrieron que los bosques más altos de la Amazonia son más antiguos, tienen más biomasa y sistemas de enraizamiento más profundos.

Estos sistemas de raíces más extensos permiten a los árboles más altos alcanzar la humedad que se encuentra a mayor profundidad en el suelo durante las estaciones secas. Sin embargo, son más vulnerables a la aridez atmosférica. Por otro lado, las hojas de los árboles altos tienen un menor contenido de agua constantemente, lo que hace que su fotosíntesis sea más adaptable a la sequía del suelo, pero también más sensible a las fluctuaciones en el agua atmosférica.