martes, 6 de diciembre de 2016

En el futuro, ¿la agricultura será totalmente automatizada?
agriculturers.com

En un futuro no muy lejano, nuestros campos podrían ser sembrados, cultivados y cosechados enteramente por flotas de máquinas cooperativas por tierra y aire.


Y trabajarán incluso día y noche.

Tractores sin conductores que pueden seguir rutas pre-programada ya están siendo desplegados en grandes granjas alrededor del mundo.

Drones están zumbando sobre campos evaluando la salud de los cultivos y las condiciones del suelo. Los sensores de tierra están monitoreando la cantidad de agua y nutrientes en el suelo, desencadenando aplicaciones de riego y fertilizantes.

Y en Japón, la primera granja de lechugas totalmente automatizada del mundo está lista para ser lanzada el próximo año.

El futuro de la agricultura está automatizado.


Escasez de alimentos, grandes negocios

El Banco Mundial dice que tendremos que producir un 50% más comida para el 2050 si la población mundial continúa aumentando a su ritmo actual.

Pero los efectos del cambio climático podrían hacer que los rendimientos de los cultivos caigan en más de un cuarto.

Entonces los tractores autónomos, los sensores terrestres, los drones y las granjas hidropónicas cerradas podrían ayudar a los agricultores a producir más alimentos, de manera más sostenible y a un menor costo.

No es de extrañar que el sector de la agricultura esté creciendo tan rápido.



Un informe de la firma estadounidense WinterGreen Research prevé que el mercado crecerá de 817 millones de dólares en 2013 a 16,3 billones de dólares en 2020.

Pero el banco de inversión Goldman Sachs es mucho más optimista, pronosticando un mercado de 240 billones de dólares en los próximos cinco años. Fabricantes como John Deere, CNH Industrial y AGCO están luchando para acaparar el mercado de tractores sin conductores.

Así como los grandes paquetes, los paquetes pequeños están dando a los agricultores hasta el segundo (up-to-the-second), datos sobre el estado de sus campos y producción- lo que el Doctor Roland Leidenfrost de Deepfield Robotics llama el “Internet de plantas y los campos”.

Bosch start-up Deepfield, con sede en Alemanía, está trabajando para automatizar el crecimiento y la prueba de semillas para el cultivo, el seguimiento de la susceptibilidad a las malas hierbas y la sequía de diferentes variedades genéticas.

Mientras tanto, los ingenieros en Shropshire, Inglaterra, están tratando de mostrar que ahora es posible cultivar un campo sin ninguna intervención humana en absoluto.

El proyecto Hands Free Hectare (Hectáreas Libres de Manos) usará drones y tractores automatizados en los próximos años para cultivar y cosechar un cultivo de cereal.



Ingenieros de la Universidad Harper Adams – junto con una empresa agrícola tecnológica de North Yorkshire llamada Precision Decisions- están probando ahora maquinas prototipos, y aspiran a plantar su cultivo en Marzo para cosechar en Septiembre.


Poda de precisión

Es difícil imaginar que los sectores más tradicionales de la agricultura- como es el hacer vino- estén necesitando mas que sol y suelo natural. Pero incluso aquí la automatización está invadiendo.

Los enólogos han usado drones para inspeccionar sus viñedos por muchos años, con cámaras de alta definición y sensores que evalúan la salud de los cultivos y del suelo.

Pero en a región francesa de Borgoña, una escasez de mano de obra ha llevado al inventor Christophe Millot a desarrollar un robot podador de viñas llamado Wall-Ye.



La última generación de estos robot rodadores de cuatro ruedas pueden hacer un corte cada cinco segundos. Este tiene seis cámaras- algunas con sensores infrarrojos- y dos brazos, y es controlado por un tablet dentro.

Esta máquina aprende como va y puede recortar el césped alrededor de la vid. Una poderosa batería solar adentro, da 10-12 horas de carga, por lo tanto con una carga de batería, este puede trabajar día y noche.

El reconocimiento visual es el gran desafío, dice Millot- sabiendo donde hacer el corte. Esto es actualmente más fácil de noche, porque las luces del robot pueden iluminar la planta, pero no su entorno.

El próximo año, el planea viajar a California- otra gran área productora de vino- para comercializar el alcance de estos robot de vinos allí.


El robot de lechugas

Pero algunas personas piensan que la tierra agrícola es vieja.

La firma japonesa de hortalizas automatizada Spread en Kyoto, será lanzada el próximo año, pudiendo producir 30000 lechugas al día, dice la empresa.

Se extiende, en lugar de cruzar los campos ondulantes, “En países como Japón, donde la tierra es realmente un recurso muy escaso, tiene más sentido apilar su producción al igual que un rascacielos”, dice JJ Price, Gerente de marketing global de Spread.

Todo después de la siembra será hecho por las máquinas- riego, poda, cosecha- en los estantes apilados desde el piso al techo. Es un poco como los solitarios drones productores en la película Silent Running de 1972.


La automatización ha reducido los costos de mano de obra en un 50% dijo el señor Price. Y las luces LED desarrolladas específicamente para los cultivos de plantas reducen los costos de energía en un 30%.

“No importa el tiempo o clima de afuera” él dice.

Y cultivando vegetales en granjas verticales significa que puedes reciclar el 98% del agua, dice Price, y producir comida mucho más cerca de donde la gente la consume, acortando en costos de transporte y emisiones.


Monitores drone

Los drones están monitoreando las tasas de crecimiento de los cultivos, detectando enfermedades e incluso rociando los cultivos con pesticidas y herbicidas.

Ahora los investigadores también están tratando de hacer que cooperen y trabajen en enjambres.

Si van a cartografiar las malas hierbas en un campo, digamos, “los drones se reclutarán unos a otros para converger en aquellas áreas donde la presencia de malezas es mayor”, dice el Dr Vito Trianni del Instituto de Ciencias y Tecnologías Cognitivas de Roma.



Aunque las señales del GPS son generalmente fuertes en áreas agrícolas, un desafío para los drones y otros robots de las tierras agrícolas es hacer frente a la conectividad de internet y conectividad móvil desigual.

Así que el equipo del Doctor Trianni está usando un radio de ultrabanda para que sus drones se comuniquen sin depender de las conexiones móviles 3G o 4G rurales.

Por supuesto, la automatización podría prometer una producción de alimentos más eficiente, pero también amenaza los trabajos agrícolas.

De 1950 a 2010, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), los trabajadores agrícolas como un porcentaje de la mano de obra disminuyeron del 81% al 48,2% en los países en desarrollo y del 35% al 4,2% en los desarrollados.

Los robots seguramente acelerarán este descenso.

bbc.com