martes, 30 de junio de 2015

Biodiversidad latinoamericana seriamente amenazada
diarioecologia.com

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El cambio climático y el desarrollo económico amenazan la biodiversidad de America Latina, una de las más ricas del mundo.
América Latina y el Caribe es la segunda región del mundo donde más ha descendido el Índice de Planeta Vivo (LPI, siglas del nombre en inglés) del Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF), según el último informe anual de esa organización.
El LPI, que refleja los cambios en la salud del ecosistema y, por tanto, es un indicador del estado de la biodiversidad, disminuyó en ese área regional un 55% de 1970 a 2013, mientras que el LPI global descendió un 30% en el mismo periodo.
Solo el área “indo-pacífica”, que incluye a China, India, Japón y Australia, entre otros países, supera a América Latina y el Caribe, con un descenso del 66% en el índice.
Según WWF, el descenso del LPI latinoamericano y caribeño es resultado de “cambios generalizados en el uso de la tierra y de la industrialización de esa región desde 1970″, pero también se debe a un “descenso catastrófico en el número de anfibios, causado en muchos casos por la propagación de enfermedades micóticas”.
La organización destaca también que las selvas tropicales de América Latina y el Caribe pierden alrededor de un 0,5% de su superficie al año, y que el área total perdida desde el año 2000 hasta el 2005 es de 3 a 4 millones de hectáreas por año.
Para elaborar el LPI global, tarea en la que han colaborado la Sociedad Zoológica de Londres y la Red de la Huella Global, WWF estudió 7.953 poblaciones de 2.544 especies de aves, mamíferos, anfibios, reptiles y peces, una muestra mayor que en anteriores informes.
Por grandes áreas geográficas, el LPI de las tropicales ha experimentado en esos 37 años un descenso del 60%, mientras que las áreas “templadas” (el resto del planeta) han registrado un aumento del 29%, lo cual no significa necesariamente, advierte WWF, que los ecosistemas de estas últimas estén en mejores condiciones que los de las primeras.
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El descenso del LPI se siente de manera similar en los animales terrestres y los marinos, pues en el primer caso la disminución fue de un 25% en 37 años y en el segundo de un 24%.
Sin embargo, también aquí es evidente las diferencias por áreas geográficas.
En las zonas tropicales, el LPI de animales terrestres disminuyó un 50% y el de animales marinos un 60%, mientras en las zonas templadas hubo aumentos del 5 y el 50%, respectivamente.
El amplio estudio de WWF, de 117 páginas, vincula el LPI con otros dos indicadores referidos a las demandas humanas de recursos naturales, a los que denomina la Huella Ecológica y la Huella Hídrica, y también dedica un capítulo a las relaciones entre biodiversidad y desarrollo y bienestar humano, y biodiversidad e ingresos de cada país, así como otro a la “economía verde”.
“Estos indicadores demuestran claramente que el rumbo de bonanza y bienestar sin precedentes de los últimos 40 años está ejerciendo presiones insostenibles sobre nuestro planeta. La Huella Ecológica muestra que nuestra demanda del mundo natural desde los años 60 se ha duplicado”, señala James P. Leape, director general de WWF Internacional.
El índice de la Huella Ecológica ha aumentado más del doble entre 1960 y 2013, con Emiratos Árabes Unidos, Qatar, Dinamarca, Bélgica y Estados Unidos en los primeros puestos.
En cuanto a la Huella Hídrica, la India el país que más consume, seguido de China, Estados Unidos, Brasil e Indonesia.
Leape, en el prólogo del informe, señala que sus resultados indican que los países ricos deben aprender a vivir de una manera que suponga una carga “mucho más ligera” para la Tierra, y reducir notablemente su “huella”, en particular en lo que se refiere a su dependencia de los combustibles fósiles.
Las economías emergentes deben por su parte hallar un nuevo modelo de crecimiento que les permita continuar mejorando el bienestar de los pueblos de una manera que la Tierra pueda realmente soportar.
Para ilustrar la situación actual, WWF destaca en su informe una serie de hechos contradictorios:
“El año en que se siguen descubriendo nuevas especies, pero hay más tigres en cautividad que en la naturaleza, el año en que el 34% de los directores ejecutivos de compañías de la región Asia-Pacífico y el 53% de los de América Latina mostraron preocupación acerca del impacto que la pérdida de biodiversidad tendrá en las perspectivas de crecimiento de sus negocios, en comparación con solo un 18 % de los directores de Europa occidental”.
“El año en el que 1.800 millones de personas usan internet, pero 1.000 millones siguen sin tener un acceso en condiciones al suministro de agua potable”, señala el informe 

lunes, 29 de junio de 2015

El miedo a los transgénicos
FRANCIS NANG’AYO (AATF) | elpais.com

En la lucha de Kenia por alimentar a su gente, los trangénicos deberían verse como un aliado


La prohibición de importar cultivos transgénicos aprobada en Kenia refleja una tendencia preocupante en un país que tradicionalmente ha sido considerado como innovador en materia agrícola. Es también un enorme retroceso para un continente que lucha para garantizar su seguridad alimentaria. Un enfoque racional y científico debe prevalecer sobre el prejuicio, el temor y la conjetura. Y Kenia puede dar el ejemplo.
La seguridad de los cultivos transgénicos (también llamados genéticamente modificados o biotecnológicos) está demostrada, y se usan con éxito en todo el mundo para mejorar la productividad agrícola. Pero la burocracia, la propaganda y la desinformación impiden a millones de agricultores africanos, incluidos los kenianos, acceder a una tecnología que puede mejorar sus economías y ayudar a remediar la escasez de alimentos.
Por la escasez actual de cereales en el país, más de un millón de kenianos dependen de ayudas alimentarias, laRed de Sistemas de Alerta Temprana de Hambrunas del país advierte que los precios del maíz —que ya son altos— seguirán creciendo hasta fin de año, lo que dificultará todavía más la seguridad alimentaria y el desempeño económico.
En la lucha de Kenia por alimentar a su gente y estabilizar su economía, la tecnología transgénica debería verse como un valioso aliado para aumentar la producción y los ingresos, con beneficios para los agricultores, los consumidores y el medio ambiente.
Los pocos países africanos que cultivan especies transgénicas han cosechado grandes réditos. Por ejemplo, la introducción de maíz, soja y algodón transgénicos en Sudáfrica ayudó a aumentar los ingresos de los agricultores en más de 1.000 millones de dólares de 1998 a 2012. Esto se debió, sobre todo, al maíz transgénico, que incrementó un 32% la cosecha anual y ahora representa casi el 90% de los cultivos de maíz sudafricanos. Pero a pesar del alza de la producción, las exportaciones de maíz de Sudáfrica todavía son insuficientes para la demanda global.
Los agricultores de Burkina Faso cultivan una variedad de algodón transgénico, con resistencia natural a un insecto perjudicial, que permite ahorrar en pesticidas. El cambio a la variedad transgénica ayudó a aumentar más de 18% la cosecha, aportó 61 dólares más de ganancia por hectárea a los agricultores y generó 1.200 millones de dólares en ingresos agrícolas, sólo en 2013.
Por ser Kenia un país pionero en el uso de tecnología agrícola, sus agricultores pueden sin duda lograr rendimientos similares. Tres cuartas partes de los alimentos de Kenia son producto de pequeños agricultores; la clase de agricultores que cultiva más del 90% de los transgénicos del mundo. Se espera que las nuevas variedades transgénicas en las que trabajan los científicos kenianos (por ejemplo, maíz resistente a insectos) aporten enormes beneficios a la población.
Además, Kenia es uno de los pocos países africanos con un sólido marco regulatorio para la revisión y aprobación de nuevas variedades de cultivo. En 2009 sancionó una ley de bioseguridad que estableció una Autoridad Nacional de Bioseguridad, uno de los primeros organismos de su tipo en el continente. Pero a pesar de los avances iniciales, la batalla por los transgénicos en Kenia se tornó innecesariamente política. En 2012, el gabinete de gobierno prohibió la importación de transgénicos sin siquiera consultar a la ANB. La decisión se basó en un estudio (ampliamente criticado y que más tarde fue retractado) que estableció falsamente una vinculación entre los alimentos transgénicos y el cáncer.
Se está desaprovechando una clara oportunidad de alimentar a la población por presiones políticas
Más recientemente, el gobierno de Kenia designó una comisión especial para investigar la seguridad de la biotecnología. Sus conclusiones no se publicaron, pero ciertos comentarios de quien preside la comisión, contrarios a los transgénicos, sugieren un aumento de la confusión que amenaza con dejar a los agricultores, los científicos y la opinión pública en el limbo justo cuando los cultivos transgénicos son más necesarios.
Una clara oportunidad de alimentar a la población se está desaprovechando por presiones políticas y burocráticas; y en este respecto, Kenia no está sola en África, lamentablemente. Por ejemplo, en Nigeria y Uganda está postergada la aprobación de leyes de bioseguridad urgentes.
El problema se relaciona en gran parte con un pequeño grupo de activistas antitransgénicos, que cuestionan la tecnología por razones “éticas” y afirman que los transgénicos son inseguros. Pero la comunidad científica viene rechazando esta idea tajantemente desde hace dos décadas. La Organización Mundial de la Salud también confirmó que “no se han demostrado efectos sobre la salud humana como resultado del consumo de dichos alimentos”. De hecho, cada variedad transgénica nueva debe cumplir con rigurosas normas sanitarias, ambientales y de eficacia.
Aunque tal vez con buenas intenciones, estos activistas y unos pocos funcionarios mal informados obstaculizan la productividad y el uso de la tecnología agrícola en toda África. Los transgénicos no son, por cierto, una panacea. Pero son una herramienta importante para lograr la seguridad alimentaria y la prosperidad económica.
Por eso, las decisiones respecto a la seguridad y salubridad de nuevas variedades transgénicas deben basarse en evidencia científica, no en discusiones políticas y argumentos “éticos” infundados. Adoptando una formulación de políticas basada en la evidencia, las autoridades kenianas pueden mejorar millones de vidas en el país y sentar un valioso precedente para todo el continente.
Francis Nang’ayo es director de asuntos regulatorios en la Fundación Africana de Tecnología Agrícola (AATF).
Traducción: Esteban Flamini.

viernes, 26 de junio de 2015

El genoma de la oveja: los secretos de la panza y la lana
JAVIER SAMPEDRO sociedad.elpais.com

El ADN completo de estos animales ilumina la evolución de los rumiantes

Ovejas de la estirpe Texel utilizadas para obtener el genoma de la especie. / CORDON PRESS

Un consorcio científico de ocho países ha leído el genoma de la oveja, uno de los primeros animales domesticados en la revolución neolítica, en un intento de mejorar y racionalizar la producción de lana. Y también de comprender los secretos del estómago de los rumiantes, cuya eficacia para digerir la hierba –uno de los alimentos más pobres y correosos imaginables— sería muy bien recibida por la industria para generar biocombustibles más sostenibles, basados en los residuos de la agricultura alimentaria convencional.
El genoma de la oveja, que ha llevado ocho años de trabajo a 73 científicos de 26 instituciones de todo el mundo, revela, según los autores, “los eventos genómicos y transcriptómicos” –es decir, los cambios en la estructura de los genes y las variaciones en sus niveles y lugares de activación— que están asociados con la evolución del rumen (o panza, la primera cámara del sistema digestivo de los rumiantes) y con la del peculiar metabolismo de las grasas de estos animales, imprescindible para la producción de su lana. El trabajo se presenta enScience.
La comparación del genoma de la oveja con el de los otros dos rumiantes secuenciados, la cabra y la vaca, ha sido particularmente iluminadora, porque los cambios en el ADN que comparten estas tres especies –y que ninguno comparte con los demás mamíferos— han puesto el foco sobre los procesos evolutivos que crearon el estómago de cuatro cámaras que les permite alimentarse de hierba. Estos cambios genómicos no tienen nada que ver con la domesticación de estos animales, que ocurrió solo unos milenios atrás. Su evolución data en realidad de 35 o 40 millones de años atrás, en coincidencia con la diversificación de la hierba y las demás gramíneas terrestres. Primero fue el pasto, y luego la panza.
El rumen, o panza, es la primera cámara del estómago rumiante, y es la que posee la capacidad de convertir la lignocelulosa, la parte más resistente e indigerible de las plantas, en productos utilizables por las células del rumiante, y en último término en la proteína animal que nosotros consumimos en forma de chuletas.
Los científicos han secuenciado (leído) el genoma de dos ovejas de la raza Texel. La secuencia de ADN resultante 2.610 millones de bases (oletras a, g, t, c del ADN). También han analizado la actividad de los genes en 94 muestras de 40 tejidos distintos (como tejido muscular, nervioso, hepático y demás). La comparación de este genoma ovino con el de cabra, vaca, yak, cerdo, camello, caballo, ratón, humano y un marsupial (el didélfido, u opossum) ha definido 4.850 genes ortólogos, es decir, que no solo existen en todas esas especies, sino que son el mismo gen en todas ellas. Este es un material muy valioso para reconstruir de forma fiable el árbol filogenético (o genealógico) de los mamíferos.
Un genoma es más el principio que el final de una investigación. Los científicos predicen que el genoma de la oveja dará lugar a un brote de nuevos estudios sobre este animal que ha resultado esencial durante milenios para alimentar y vestir a la especie humana.

jueves, 25 de junio de 2015

Las abejas latinoamericanas trabajan para alimentar a la humanidad
bancomundial.org

Abel Ovando inspecciona una de sus colmenas. / I. SCHAEFER (BANCO MUNDIAL )

Los insectos polinizadores latinoamericanos hacen posible la producción de al menos un tercio de los alimentos.

Abel Antonio Ovando Maza trabaja desde hace más de veinte años entre las colmenas de su familia, en Ocozocoautla, en el sureño estado mexicano de Chiapas. Por eso, permanece imperturbable ante las abejas que vuelan a milímetros de su rostro mientras habla.

Además de producir miel, Abel Antonio y su familia han plantado más mil cedros, cítricos y otros árboles frutales en las seis hectáreas de su propiedad. La reforestación ha sido buena para el ambiente y también para las finanzas familiares.

Una de las ventajas, explica Ovando, es que los árboles evitan que llegue viento a las colmenas. Pero tal vez lo más importante es que se les da más comida a los insectos, ya que las abejas pueden padecer de "estrés" al no encontrar suficiente alimentos en los alrededores.

"Tiende a disminuir su postura, a bajar la producción de miel, de abejas, de todo. Una colmena tiende a veces hasta a desaparecer o emigrar", agrega el apicultor. "En cambio, con la reforestación, en el caso de cítricos, vuelve a incrementarse. No hay evasión de colmenas y hay mayor cantidad de producción de miel", explica.

Según el Gobierno de Estados Unidos, el 75% de las plantas nativas en el mundo requiere de polinización, un trabajo que es hecho en buena parte por las abejas. Según estos mismos datos, uno de cada tres bocados que consumimos tiene que ver con la labor de los insectos polinizadores, concretamente de las abejas.

Pero la población global de estos insectos ha disminuido en las últimas décadas, especialmente en Estados Unidos y en algunas partes de Europa. Si en 1940 había 5.7 millones de colonias de abejas en Estados Unidos, hoy en día son 2.74 millones.

Es decir, en unos 70 años se ha reducido a la mitad el número de abejas en el país. La preocupación es tal que el gobierno del presidente Barack Obama acaba de presentar una estrategia para promover la salud de las abejas y demás polinizadores.

Dulce oro líquido

Pero para México no se trata únicamente del papel de la polinización de las plantas que nos alimentan, sino directamente del principal producto de las abejas: la miel. El país es el tercer exportador mundial, con casi 2 millones de colmenas y unos 43.000 productores. El principal cliente es Alemania, adonde va a parar el 43% de este "oro líquido", seguido por Estados Unidos.

Para cuidar sus animales y sus ingresos, hace dos años Ovando y otros 290 apicultores se incorporaron al proyecto Sistemas Productivos Sostenibles y Biodiversidad (SPSB) de la Comisión Nacional de la Biodiversidad, apoyado por el Banco Mundial. El proyecto ayuda a pequeños agricultores a organizarse en asociaciones y a aprender nuevos métodos de producción amigables con la biodiversidad.

Ovando ya había comenzado a reforestar desde hace 10 años, bastante antes de entrar al proyecto, pero dice que ahora "viene un plan más fuerte." "Venimos recolectando semillas nativas, para no estar induciendo plantas que no sean nativas, porque en algunos casos no han pegado y se han muerto", afirma.

Dice que con el programa hay algunos socios en la costa de Chiapas que han empezado a plantar mango porque da mucho néctar y polen. "Ya están poniendo atención a esta parte de conservar," dice Josefa Higuera Pérez, asesora técnica de la asociación de apicultores.

Mejor ambiente, más ingresos

El desafío de la iniciativa es doble, porque se trata de cuidar el medio ambiente con la conservación de la biodiversidad, sí, pero a la vez mejorar los ingresos de los pequeños productores, como explica Svetlana Edmeades, experta en desarrollo rural del Banco Mundial. "El proyecto se dirige a superar los retos de los pequeños productores rurales de baja producción, bajos precios por unidad vendida, y falta de acceso a mercados especializados", dice.

Agrega que esta iniciativa se enfoca en siete sistemas productivos (cacao, café, ganadería silvopastoril, silvicultura, miel, ecoturismo y uso de vida silvestre) dentro de corredores biológicos prioritarios.

"Se espera que al final del proyecto SPSB los pequeños productores van a beneficiarse de una mejor integración en cadenas de valor con rápido crecimiento y mejores precios de venta, y eventualmente también de un aumento en el ingreso," afirma la experta.

Para Ovando, por ejemplo, los resultados ya son visibles. Además de haber tecnificado su trabajo, también han diversificado su oferta de productos. "Nos ha ayudado a tecnificarnos, produciendo nuestras propias crías y produciendo nuestros insumos", dice. Además de miel y polen, la pequeña empresa familiar también ofrece jarabes, cremas y champú.

martes, 23 de junio de 2015

Santiago de Chile se ahoga en una nube de contaminación
internacional.elpais.com

Las autoridades decretan emergencia ambiental por primera vez desde 1999 por la mala calidad del aire en la capital


Los cerca de siete millones de habitantes de la capital chilena están acostumbrados a respirar aire contaminado. En una ciudad cercada por cerros y cordilleras, que concentra un 40% de la población del país, los santiaguinos desde hace décadas se han habituado a la fotografía de Los Andes manchada por una espesa nube gris. En invierno se produce menor ventilación y, sin lluvias que contribuyan a la limpieza, las enfermedades respiratorias aumentan y las autoridades toman medidas de urgencia, como decretar restricción vehicular para los automóviles que no son catalíticos. La situación que se ha vivido en Santiago de Chile esta semana, sin embargo, ha excedido los límites de la aparente normalidad capitalina: el Gobierno regional ha debido decretar la primera emergencia ambiental desde 1999 por la mala calidad del aire de esta ciudad y la mayoría de la población se ha visto obligada a enfrentar, de alguna u otra forma, las consecuencias de este evento.
En Santiago arranca el invierno, una estación marcada habitualmente por el frío y la lluvia, pero este 2015 se mantiene como un otoño eterno. Si habitualmente a estas alturas del año han caído 100 milímetros en la capital, este año sólo se han registrado 11,9, según la Dirección Meteorológica de Chile. De acuerdo al intendente, Claudio Orrego, si esta semana no se producen precipitaciones, se tratará de mes de junio más seco desde 1968.
Este fenómeno ha contribuido, en buena medida, a que la contaminación atmosférica haya empeorado y que las autoridades tomaran medidas drásticas, como no lo hacían hace 16 años. El Gobierno metropolitano impidió la circulación de un 40% del total de coches de la ciudad, la paralización de 1347 fuentes fijas industriales y la prohibición de usar estufas a leñas, entre otras determinaciones. Pese a que no se suspendieron las clases de los estudiantes, se recomendó que los niños y jóvenes no realizaran clases de gimnasia y a la población, en general, que no practiquen deportes.
No resulta clara la fórmula que se adoptará en Santiago para no depender de la cantidad de lluvia caída para asegurar calidad del aire. De acuerdo a los expertos, sin embargo, parece evidente que se tendrán que seguir adoptando medidas para incentivar el transporte público y restringir la compra de automóviles. Solo en la capital, la cantidad de coches ha aumentado un 83% entre 2003 y 2013: de 925.000 a 1.695.000, llegando a concentrar un 40% del total del país.
Para este martes, las autoridades han rebajado la alerta a la categoría de preemergencia ambiental. Habrá restricción para los vehículos catalíticos cuyas placas finalicen en 5 y 6 y para los no catalíticos que tengan patentes terminadas en 9, 0, 1, 2, 3 y 4. Los conductores que no respeten la restricción deberán pagar una multa de unos cien dólares.

lunes, 22 de junio de 2015

Ya es posible aprovechar la energía solar también durante la noche
diarioecologia.com

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El descubrimiento, podría conducir a sistemas mucho menos costosos y más eficientes para almacenar energía solar en forma de combustibles basados en hidrógeno. Esto podría ser un gran paso adelante en el desarrollo de un “reemplazo viable” a los combustibles fósiles.
Uno de los problemas más significativos de la energía solar, es que está ahí, disponible, pero solo durante el día, solo durante días soleados, o sea que por momentos sobra y por momentos falta. Almacenarla no es un tema trivial y es aquí donde científicos del Technion han dado un paso gigante. Usando el poder del sol y películas ultrafinas de óxido de hierro (comúnmente conocido como óxido), investigadores israelíes han encontrado una nueva manera de dividir las moléculas de agua en hidrógeno y oxígeno.
“Nuestro enfoque es el primero de su tipo”, dice el investigador principal, Profesor Avner Rothschild, del Departamento de Ciencia de Materiales e Ingeniería. “Hemos encontrado una manera de atrapar la luz en películas ultrafinas de óxido de hierro que son 5.000 veces más delgadas que una hoja de papel de oficina normal. Esta es la clave que permite lograr una alta eficiencia y un bajo costo.”
El óxido de hierro es un material semiconductor barato de producir, estable en el agua, y a diferencia de otros semiconductores como el silicio puede enfrentar el óxido, sin ser corroído, o descomponerse. Pero también presenta desafíos, el más grande de los cuales fue encontrar una manera de superar sus malas propiedades de transporte eléctrico. Los investigadores han luchado durante años con esto.
“Nuestra trampa de luz, supera esta desventaja, lo que permite una absorción eficiente de las películas ultrafinas en el que los portadores de carga fotogenerados se recogen de manera eficiente”, dice el profesor Rothschild.
El avance podría hacer posible el diseño de células solares baratas que combinan fotoelectrodos ultrafinos de óxido de hierro con las células fotovoltaicas convencionales basadas en silicio u otros materiales para producir electricidad e hidrógeno.
Según el Profesor Rothschild, estas células podrían almacenar la energía solar para uso según la demanda, 24 horas por día, contrastando con las células fotovoltaicas convencionales, que proporcionan energía sólo cuando brilla el sol (y no por la noche o cuando está nublado).
Los resultados también se podrían utilizar para reducir la cantidad de elementos extremadamente raros que la industria de panel solar utiliza para crear el material semiconductor en su segunda generación de células fotovoltaicas.
El método del equipo Technion captura la luz de forma que podría ahorrar el 90% o más de los elementos raros como el telurio e indio, sin comprometer su rendimiento.
El Instituto Technion-Israel de Tecnología es una importante fuente de innovación y capacidad intelectual que impulsa la economía israelí.

jueves, 18 de junio de 2015

La "batalla" contra el hambre en América Latina no está terminada 
noticias.terra.com.ar

La "batalla" contra el hambre en América Latina y el Caribe "no está terminada" pese a ser la región "en el mundo que más avance ha tenido en la reducción" de este flagelo, según expertos de la FAO.

"América Latina y el Caribe es la región en el mundo que más avance ha tenido en la reducción del número de personas que padecen hambre", que desde 1990 a la actualidad ha disminuido del 15,3 % a un 6,1 %, destacó el representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en El Salvador, Alan González.

Sin embargo, pese a esos buenos resultados en esta región y el mundo, la "batalla no está terminada", dijo a Efe el coordinador subregional para Mesoamérica de la FAO, Ignacio Rivera.

Ambos funcionarios de la FAO participaron esta semana en el Primer Encuentro Centroamericano y de República Dominicana sobre agricultura familiar, que se celebró de miércoles a viernes en San Salvador con la asistencia de funcionarios y expertos de la región.

La lucha contra el hambre sigue porque aún "hay 805 millones de personas en el mundo que no tienen la nutrición adecuada, es un tema grave, sobre todo en África, el sureste asiático y (...) en América Latina que aún nos resta", expresó Rivera.

Precisó que en "Latinoamérica y el Caribe aún hay 37 millones de personas que padecen hambre en el día a día, este es un motivo de preocupación de los países y de la comunidad internacional", por lo que se debe seguir trabajando.

De acuerdo a Rivera, el esfuerzo "en materia de seguridad alimentaria" a nivel mundial "está dando resultado" porque la población afectada por el hambre ha disminuido.

"Sin embargo, no hay un indicador aceptable, si no fuera este el número cero", sentenció.

"Es decir, la batalla aún hay que continuarla, hay que desplegar todos los recursos necesarios para alcanzar este indicador" cero, enfatizó.

América Latina y el Caribe ha logrado la meta en porcentaje del Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) para disminuir el hambre entre 1990 y 2015, pero no en número de personas que padecen este flagelo, reconoció.

La región debe bajar de 37 millones a 34,5 millones las personas que padecen hambre, destacó Rivera.

"Creemos que el año próximo estaremos en condiciones de (...) cumplir con los dos indicadores de los Objetivos del Milenio, el porcentual y el numérico", agregó.

La disminución alcanzada desde 1990 en la población que padece hambre, del 15,3 % a un 6,1 %, significa que América Latina y el Caribe "alcanzó ese primer Objetivo de Desarrollo del Milenio" y "se sobrepasó la meta, que era de 8 %", destacó por su parte González.

Para continuar avanzando en la lucha contra hambre, la agricultura familiar se ve "como foco de atención para resolver el tema de la inseguridad alimentaria en el mundo", ya que esta modalidad es "sumamente relevante, genera bienes, empleo y alimentos", destacó Rivera.

El hecho de que 805 millones de personas en "el mundo hoy no tengan la satisfacción diaria necesaria" para combatir el hambre, "implica un reto para todas las sociedades", señaló.

"Curiosamente la mayoría de estas personas están ubicadas en el medio rural y la mayoría de los productores en el medio rural son de escala familiar", lo que aumenta la importancia de la agricultura familiar, enfatizó.

En América Latina y el Caribe la agricultura familiar incluye a 17 millones de familias, que proveen entre el 27 % y el 67 % de los alimentos y generan entre el 57 % y el 77 % del empleo agrícola en la región, según datos de la FAO.

En Centroamérica está compuesta "por al menos 2.350.000 familias, esto representa alrededor de 12 millones de personas, más de dos tercios de la población rural, y generan el 50 % del valor de la producción agropecuaria centroamericana", de acuerdo a Rivera.

Sin embargo, "la agricultura familiar como proveedora de alimentos y de seguridad alimentaria enfrenta retos significativos", destacó el coordinador de la FAO para Mesoamérica.

Apuntó que "la baja productividad de este tipo de agricultura es uno de sus principales desafíos; sus causas son múltiples e interrelacionadas, incluyen entre las más notables la alta concentración de la tenencia de la tierra en detrimento de la agricultura familiar", además del "bajo nivel tecnológico" y el cambio climático, entre otros.

A pesar de esos problemas, la agricultura familiar es la "columna vertebral" para erradicar el hambre y la pobreza en Latinoamérica y el Caribe, subrayó Rivera.

miércoles, 17 de junio de 2015

Las abejas generan 3.000 dólares de beneficios por hectárea
larazon.es | Efe.  Londres

Las abejas generan 3.000 dólares de beneficios por hectárea

Las especies de abeja salvaje más comunes son las que producen mayores beneficios para los cultivos humanos gracias a la polinización, según un estudio que publica la revista Nature Communications.
Científicos de la Universidad de Wageningen (Holanda) sostienen que el 80 % de la polinización producida por abejas salvajes se debe a una minoría de especies -el 2 %-, y afirman que dedicar mayores recursos a proteger a esas clases de abeja devolvería mayores réditos económicos, aunque podría poner en peligro la biodiversidad.

«Existen sobradas pruebas de que cuanto más diverso es un ecosistema, más beneficios genera a la gente», lo que «se ha convertido en un argumento clave para conservar la biodiversidad», señala el estudio.
«Sin embargo, no está claro cuánta biodiversidad es necesaria para que se cumplan esos servicios de un modo que sea efectivo en relación a los costes», añade.

El investigador David Kleijn y su grupo han reunido información a partir de 90 estudios previos sobre abejas salvajes en cinco continentes y han analizado cuáles de las 785 especies conocidas otorgan los mejores resultados económicos en la polinización de cultivos.
Han concluido que las comunidades de abejas salvajes contribuyen de media en unos 3.000 dólares (2.664 euros) por hectárea a la producción, y que la mayoría de esos beneficios son debidos a una pequeña parte de las especies más comunes.

Los científicos sugieren que centrar los esfuerzos de conservación en esas especies sería la mejor estrategia para maximizar los resultados económicos, si bien admiten que esa estrategia puede no ser compatible con la protección a ciertas especies en peligro y la diversidad biológica.

martes, 16 de junio de 2015

Como los biocombustibles pueden ayudar a disminuir la emisión de gases de efecto invernadero
diarioecologia.com

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Las discusiones internacionales acerca de las causas e implicaciones para la humanidad del llamado «efecto invernadero», provocado por las crecientes emisiones a la atmósfera de gases tales como: dióxido de carbono (CO2), metano, óxido nitroso y los cloro-flurocarbonatos, reflejan la necesidad de un enfoque integral en el tratamiento de los problemas ambientales y del desarrollo, así como la necesidad de una acción concertada de la comunidad internacional para mitigar los efectos del calentamiento global.
El efecto invernadero acrecentado por la contaminación puede ser, según algunas teorías, la causa del calentamiento global actualmente observado. Según estimaciones del Panel Intergubernamental sobre Cambios Climáticos (PICC), de mantenerse las actuales tendencias en las emisiones de «gases del efecto invernadero», la temperatura media global aumentaría a un ritmo de 0.3 °C por década.
Consecuentemente, se producirán incrementos en el nivel del mar que pudiera ser alrededor de un metro para el año 2100.
Los métodos de reducción de la toxicidad y el humeado de los motores de combustión interna (MCI) pueden ser divididos en dos grupos: los constructivos y los explotativos. Entre los métodos constructivos figuran la recirculación de los gases de escape y la neutralización de los mismos. Dentro los métodos explotativos se encuentran: el estado técnico del MCI y su correcta regulación, perfeccionamiento de los procesos de formación de la mezcla y de combustión, la correcta selección de los combustibles y sus aditivos, y la utilización de los biocombustibles.
Los biocombustibles son uno de los combustibles alternativos que disfrutan de unas ventajas más claras y que se obtienen a partir de productos agrícolas, no contienen azufre y por lo tanto no forman el anhídrido sulfuroso, uno de los principales causantes de la lluvia ácida, ni incrementan la cantidad de CO2 emitida a la atmósfera. Los análisis realizados, tanto en bancos de pruebas como en experiencias piloto, dejan bien claro que la utilización de los biocombustibles ofrece ventajas medioambientales en comparación con los combustibles convencionales como el gasoil. Los biocombustibles son los productos químicos que se obtienen a partir de materias primas de origen agropecuario, como es el caso del piñón blanco o jatropha curcas, agroindustrial o de otra forma de biomasa y que cumplen con las normas de calidad establecidas por las autoridades competentes para su uso como carburantes.
El consumo de aceite vegetal y el rendimiento del vehículo es similar al consumo y rendimiento del diesel, manteniendo las características de sonido, fuerza y rendimiento del motor y obtiene un beneficio ecológico con la menor emisión de gases contaminantes, incluso el olor de la combustión que sale por el tubo de escape se torna agradable y se asemeja a una fritura de la cocina. Las ventajas comparativas ambientales también son evidentes: El proceso general hasta la combustión de un galón de petróleo genera la emisión de 10 kilos de CO2, mientras que la de un galón de biodiesel genera solamente 4 kilos de CO2.

lunes, 15 de junio de 2015

En Tierra del Fuego el castor no tiene freno y ya amenaza a Bariloche
clarin.com
Una plaga que avanza y pone en peligro la riqueza forestal.En la isla superan en cantidad a la gente. En 2011 se firmó un acuerdo de erradicación que aún no se puso en marcha.
Bahía Inútil, Puerto Hambre, Isla Furia. En 1520 los exploradores creyeron que la Isla Grande de Tierra del Fuego sería imposible de poblar. El frío extremo, la hostilidad del paisaje y las dificultades para llegar la condenaron como páramo. Sin embargo, esa porción de tierra austral fue colonizada en tan sólo 70 años por el castor, especie introducida en la isla para fomentar la industria peletera. El proyecto no prosperó y ahora en la provincia hay más castores que habitantes, tienen un total dominio de los bosques y creen que en 25 años llegarán a Bariloche. ¿El plan de control? Fue aprobado en 2011 pero aún no está en marcha.
El jueves se estrenó "Castores, la invasión del fin del mundo", un documental sobre la especie exótica que se introdujo en la isla en 1946. El film arranca con una foto en blanco y negro de dos personas vestidas de corbata y mocasines a bordo de un gomón. Más atrás, flota sobre el Lago Fagnano el avión del que bajaron a 20 castores provenientes de Canadá.
Durante 35 años su caza estuvo prohibida. En ese tiempo los animales se reprodujeron, cambiaron el curso de los ríos, derribaron árboles centenarios e inundaron bosques. En 1994 detectaron que no sólo habían tomado todas las cuencas de la isla y las adyacentes, también cruzaron el Estrecho de Magallanes y alcanzaron la Península Brunswick, ya en territorio continental de Sudamérica. Hoy en Tierra del Fuego hay 150 mil castores y 134 mil habitantes.
"Es esperable que la invasión llegue a Bariloche. Está comprobado en Tierra del Fuego que también puede habitar ambientes sin árboles, es decir, la estepa. Así que no hay razón para no predecir que la invasión llegue a Bariloche o más", resume Christopher Anderson, biólogo de Conicet.
El castor no es la única especie exótica que se introdujo en Argentina ni en el archipiélago, pero está entre las más dañinas. "El castor cambia drásticamente la dinámica de los ríos y arroyos, convierte tramos en lagunas, tiene fortísimo impacto sobre el bosque de riberas", enumera Claudio Chehébar, biólogo a cargo de la Delegación Regional Patagonia de la Administración de Parques Nacionales. En Canadá, el castor tiene depredadores naturales; en el sur, no. En su tierra nativa, los árboles cortados rebrotan, pero en la isla una lenga que es cortada, muere. En el norte, los árboles suelen soportar la inundación que producen los embalses; en Tierra del Fuego, no.
Hace siete años se realizó un estudio para erradicar al castor de la Patagonia e impedir su avance al continente. Los investigadores concluyeron que la eliminación del roedor era urgente y prioritaria. Además de afectar la flora, sus diques cortan caminos, afectan a la ganadería y agricultura de la zona. Marta Lizarralde, directora del laboratorio del Centro Austral de Investigaciones Científicas, dice que además de que no hubo continuidad en el control, hay dificultades técnicas, organizativas y financieras. "Necesitamos un proyecto a largo plazo y permanente. Estamos controlando como podemos a este ingeniero hidraúlico perfecto, pero destructivo que es el castor", dice.
En 2011, Argentina y Chile firmaron un convenio de erradicación. Pero aún no hubo avances. Desde la Secretaría de Ambiente de la Nación aseguran que la asignación de fondos "es inminente". "El proyecto tiene asignado US$ 3,9 millones del Fondo del Medio Ambiente Mundial, a través de Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura, y un aporte de US$ 18,2 millones de Nación. En su última visita a Roma, la presidenta Cristina Fernández firmó acuerdos que incluyen la asignación de fondos. Apenas estén disponibles implementaremos varias estrategias, entre ellas la de controlar al castor", señalaron.

viernes, 12 de junio de 2015

¿Cuál es el virus que preocupa en Corea del Sur?
clarin.com

En alerta
El Síndrome Respiratorio de Oriente Medio o nuevo Coronavirus provocó la muerte de nueve personas en el país asiático. Además, hay otras 108 personas infectadas y más de 2.500 fueron puestas en cuarentena.
Estudiantes se desinfectan las manos antes de llegar a clases en Seúl, Corea del Sur. / EFE
En Corea del Sur, el brote Síndrome Respiratorio de Oriente Medio o nuevo Coronavirus ha desatado la alarma. Parte de la población sale a la calle con barbijo, extrema las medidas de higiene y evita entrar a hospitales y circular por lugares concurridos. La presidenta Park Geun-hye decidió hoy cancelar una visita programada a Estados Unidos luego de que se conociera que las muertes provocadas por el virus son nueve y que hay 108 personas infectadas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la enfermedad provocada por el virus ("MERS-Cov") en general se presenta con fiebre, tos y dificultades respiratorias. Puede desencadenar en neumonía y en algunos casos también incluye síntomas gastrointestinales, como la diarrea. En los casos más drásticos, la enfermedad puede causar insuficiencia respiratoria.
La OMS señala que "no parece fácil que la enfermedad se transmita de persona a persona, a menos que haya un contacto estrecho", como el caso de un médico que atienda a un paciente sin los cuidados necesarios y, por otro lado, que "la ruta de transmisión de animales a personas no se conoce bien", pero los camellos son considerados una fuente animal de infección en los seres humanos. Sin embargo, la mayoría de los casos fueron atribuidos a infecciones de una persona a otra
El virus apareció en 2012 en Arabia Saudí y, desde entonces, la OMS lleva registrados 1.190 casos de personas infectadas, de las cuales 444 no lograron sobrevivir. En Corea del Sur, donde el brote es considerado el más grande fuera de Oriente Medio, las autoridades ya pusieron en cuarentena a más de 2.500 personas. El primer caso detectado en el país fue el pasado 20 de mayo.
En cuanto a la prevención y el tratamiento de la enfermedad -siempre según la información de la OMS-, se considera que el consumo de productos de origen animal crudos o poco cocinados, como la leche y la carne, implican un elevado riesgo de infección. Sin embargo, los alimentos bien procesados por cocción o pasteurización no significan un peligro para el consumo. Por el momento no hay una vacuna contra el Coronavirus disponible, ni existe un tratamiento. La tasa de mortalidad por la enfermedad es del 36%.
El viaje de la presidenta surcoreana estaba programado para el próximo sábado. En la reunión con Obama se iban debatir diversos asuntos de interés bilateral, entre ellos la amenaza a la seguridad que plantea Corea del Norte con sus programas nucleares y de misiles. 
Los consejos de la OMS
La Organización Mundial de la Salud recomienda que todos los Estados"mantengan la vigilancia de las infecciones respiratorias agudas fraves y examinen cuidadosamente todos los casos inusuales"
Además, señala que "debe considerarse que las personas con diabetes, insuficiencia renal, neumopatías crónicas e inmunodepresión corren un alto riesgo de contraer enfermedad grave tras la infección por este virus".

jueves, 11 de junio de 2015

Los corales del Caribe al borde del ‘abismo’
ECOTICIAS.COM 

La supervivencia de los corales del Caribe está fuertemente amenazada y los que quedan, apenas una sexta parte de los arrecifes coralinos originales, pueden desaparecer en 20 años, advierte un reciente informe.

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Las principales razones de que esta especie se encuentre en peligro de extinción son el crecimiento explosivo de la población, la sobrepesca, la contaminación de las zonas costeras, el calentamiento global y las especies invasoras, señala la investigación científica. Se trata de una evaluación conjunta del Programa de la ONU para el Medioambiente y de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) en la que participaron 90 investigadores, los que concuerdan en que más la mitad de los corales del Caribe desaparecieron desde los años 70. 

“El ritmo al que los corales del Caribe disminuyeron es realmente alarmante”, declaró el director de Programa Global Marine del UICN, Carl Gustaf. Sin embargo, su suerte no está echada, asegura el informe, que afirma que la reintroducción de peces loros (especie herbívora) y el mejoramiento de gestión de su hábitat pueden salvarlos. La pérdida de ese pez -por una pesca excesiva el siglo pasado-, así como de erizos marinos -debido a una enfermedad desconocida que los diezmó en el siglo XX- es considerada una de las causas de la pérdida de corales en el Caribe. La fuerte disminución de estas especies rompió el delicado equilibrio del ecosistema de los corales y le permite a las algas, de las que normalmente los corales se alimentan, ahogar los arrecifes.

Para eso se requiere una protección frente a la sobrepesca y a la contaminación de los litorales marítimos, que podrían ayudar a la recuperación de los arrecifes y hacerlos más resistentes frente al cambio climático, que provoca un aumento en la temperatura de los mares. Este último fenómeno es considerado como la causa principal de la degradación de los corales debido a que aumenta el nivel de acidez de los océanos y causa su blanqueamiento o pérdida de pigmentación. La investigación, basada en el análisis de más de 35.000 muestras en 90 lugares diferentes del Caribe, corrobora también que los corales protegidos de la sobrepesca y la contaminación costera (por el turismo o el desarrollo de infraestructuras) soportan mejor el cambio climático. Por otra parte, se consiguió determinar que las población más saludable de corales se encuentra en áreas donde se prohibió o limitó cualquier actividad que pueda dañar a los peces loro, como en el santuario nacional marino de Estados Unidos, Flower Garden Banks, en la zona norte del Golfo de México, Bermuda y Bonaire.

El informe alienta medidas como la de Barbuda, que está preparando el plan de gestión para convertir una tercera parte de sus aguas costeras en reservas marinas. Las zonas del Caribe donde los corales más disminuyeron corresponden a Jamaica y toda la extensión del arrecife de Florida, desde Miami hasta Key West, así como las Islas Virginia, en Estados Unidos. El Caribe alberga al 9 por ciento de los corales de todo el mundo, que en total vive en aguas de 38 países, donde su existencia genera importantes ingresos a las poblaciones locales a través de la pesca, el turismo y otros servicios. Se considera que la pesca artesanal, que es una actividad esencial para la economía de varios países caribeños, tiene efectos “catastróficos” sobre los corales y la supervivencia de éstos.
 
Fuente original: http://www.canalazul24.com/

miércoles, 10 de junio de 2015

La Antártida, el climatizador del planeta
ADOLFO MARRQUINhoy.es

  • Pingüinos sobre la Antártida.

  • Cuando se habla de frío o de hielo, lo más común es pensar en el frío polar, pero pensando sobre todo en el del Norte, al menos en este hemisferio; en condiciones extremas de frío, suele decirse… “esto parece el Polo Norte”. Sin embargo donde nos encontramos con más frío y más hielo, con enorme diferencia, no es en el Norte, sino en el Sur.
    En cuanto a las temperaturas, la Antártida se mantiene permanentemente tan fría que nunca deberían fundirse la nieve y el hielo acumulados sobre ese continente, puesto que su temperatura media anual es del orden de -50 ºC (50 grados centígrados bajo cero), habiéndose registrado una temperatura mínima absoluta próxima a los -90 ºC (90 grados bajo cero), en la Base Antártica Rusa de Vostok, situada cerca del Polo Sur geomagnético.
    La Antártida contiene aproximadamente el 90 por ciento del hielo del planeta, lo que significa que casi tres cuartas partes del agua dulce de la Tierra están almacenadas allí. Por el contrario, comparado con la Antártida, al acercarnos al Polo Norte la temperatura media en invierno en el Ártico, apenas alcanza los -35 ºC (35 grados centígrados bajo cero), y además se vuelve mucho más cálido en el verano, llegando incluso a fundirse grandes masas de su hielo, y desgraciadamente “cada vez más” en el marco del actual calentamiento global.
  • Podríamos preguntarnos si esto ha sido siempre así, a lo largo de los millones de años de vida de nuestro planeta, y la respuesta es que “no al principio, y después sí, pero…”. Si nos fijamos sólo en los últimos millones de años, los más recientes, en líneas generales podríamos decir que sí, pero con notables cambios en el transcurso del tiempo.
    A través de una serie de investigaciones, un equipo internacional de científicos ha descubierto que lo más probable es que la capa de hielo antártica, naturalmente inexistente en el magma del que surgió en nacimiento del planeta, se formase muy posteriormente, debido a un descenso en los niveles de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera. Los resultados del estudio, que han sido publicados en la revista Science, revelan cómo este gas de efecto invernadero (GEI) participó en los fenómenos climatológicos más importantes de nuestro planeta, y ha contribuido a conformar la realidad climática pasada, presente y “sin duda” la futura.
    Los científicos examinaron moléculas procedentes de algas antiguas encontradas en testigos extraídos de las profundidades marinas, encontrando la existencia de un umbralpara los niveles bajos de CO2, por debajo del cual el enfriamiento fue tal que se habría formado entonces la capa de hielo en el Polo Sur. Hace unos 34 millones de años, la concentración de CO2 se redujo del orden de un 40 %, dando lugar a unarelativamente rápida formación de una capa de hielo de cerca de 2 km de espesorsobre la Antártida.
    En términos geológicos, el clima de la Tierra, como consecuencia de las fluctuaciones en los niveles de CO2pasó de templado y sin hielo, a frío y con una importante capa de hielo. En nuestro planeta, al final de la época del Eoceno, habitaban mamíferos, anfibios y reptiles, que compartían ambos polos, el Norte y el Sur, reinando por doquier un clima subtropical.
    Posteriormente, durante un periodo de unos cien mil años, las temperaturas continuaron descendiendo significativamente, lo que produjo la desaparición de varias especies animales, la reducción de los niveles del mar y el reforzamiento del citado recubrimiento de hielo en la Antártida. Desde entonces, las capas de hielo marino y polar han influido en el clima, dando lugar a la circulación general atmosférica planetaria de masas de aire, y repercutiendo, no sólo en las temperaturas, sino también en las precipitaciones, los vientos y las demás variables.
    La llegada de aquel hielo antártico fue el origen de todos los posteriores cambios del clima; antes el clima era demasiado cálido como para que se formara y mantuviera una capa de hielo, pero después y desde entonces, las temperaturas se han movido en una banda de valores compatible con el mantenimiento de la creada estructura de hielos polares.
  • Podríamos preguntarnos si esto ha sido siempre así, a lo largo de los millones de años de vida de nuestro planeta, y la respuesta es que “no al principio, y después sí, pero…”. Si nos fijamos sólo en los últimos millones de años, los más recientes, en líneas generales podríamos decir que sí, pero con notables cambios en el transcurso del tiempo.
    A través de una serie de investigaciones, un equipo internacional de científicos ha descubierto que lo más probable es que la capa de hielo antártica, naturalmente inexistente en el magma del que surgió en nacimiento del planeta, se formase muy posteriormente, debido a un descenso en los niveles de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera. Los resultados del estudio, que han sido publicados en la revista Science, revelan cómo este gas de efecto invernadero (GEI) participó en los fenómenos climatológicos más importantes de nuestro planeta, y ha contribuido a conformar la realidad climática pasada, presente y “sin duda” la futura.
    Los científicos examinaron moléculas procedentes de algas antiguas encontradas en testigos extraídos de las profundidades marinas, encontrando la existencia de un umbralpara los niveles bajos de CO2, por debajo del cual el enfriamiento fue tal que se habría formado entonces la capa de hielo en el Polo Sur. Hace unos 34 millones de años, la concentración de CO2 se redujo del orden de un 40 %, dando lugar a unarelativamente rápida formación de una capa de hielo de cerca de 2 km de espesorsobre la Antártida.
    En términos geológicos, el clima de la Tierra, como consecuencia de las fluctuaciones en los niveles de CO2pasó de templado y sin hielo, a frío y con una importante capa de hielo. En nuestro planeta, al final de la época del Eoceno, habitaban mamíferos, anfibios y reptiles, que compartían ambos polos, el Norte y el Sur, reinando por doquier un clima subtropical.
    Posteriormente, durante un periodo de unos cien mil años, las temperaturas continuaron descendiendo significativamente, lo que produjo la desaparición de varias especies animales, la reducción de los niveles del mar y el reforzamiento del citado recubrimiento de hielo en la Antártida. Desde entonces, las capas de hielo marino y polar han influido en el clima, dando lugar a la circulación general atmosférica planetaria de masas de aire, y repercutiendo, no sólo en las temperaturas, sino también en las precipitaciones, los vientos y las demás variables.
    La llegada de aquel hielo antártico fue el origen de todos los posteriores cambios del clima; antes el clima era demasiado cálido como para que se formara y mantuviera una capa de hielo, pero después y desde entonces, las temperaturas se han movido en una banda de valores compatible con el mantenimiento de la creada estructura de hielos polares.
  • Podríamos preguntarnos si esto ha sido siempre así, a lo largo de los millones de años de vida de nuestro planeta, y la respuesta es que “no al principio, y después sí, pero…”. Si nos fijamos sólo en los últimos millones de años, los más recientes, en líneas generales podríamos decir que sí, pero con notables cambios en el transcurso del tiempo.
    A través de una serie de investigaciones, un equipo internacional de científicos ha descubierto que lo más probable es que la capa de hielo antártica, naturalmente inexistente en el magma del que surgió en nacimiento del planeta, se formase muy posteriormente, debido a un descenso en los niveles de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera. Los resultados del estudio, que han sido publicados en la revista Science, revelan cómo este gas de efecto invernadero (GEI) participó en los fenómenos climatológicos más importantes de nuestro planeta, y ha contribuido a conformar la realidad climática pasada, presente y “sin duda” la futura.
    Los científicos examinaron moléculas procedentes de algas antiguas encontradas en testigos extraídos de las profundidades marinas, encontrando la existencia de un umbralpara los niveles bajos de CO2, por debajo del cual el enfriamiento fue tal que se habría formado entonces la capa de hielo en el Polo Sur. Hace unos 34 millones de años, la concentración de CO2 se redujo del orden de un 40 %, dando lugar a unarelativamente rápida formación de una capa de hielo de cerca de 2 km de espesorsobre la Antártida.
    En términos geológicos, el clima de la Tierra, como consecuencia de las fluctuaciones en los niveles de CO2pasó de templado y sin hielo, a frío y con una importante capa de hielo. En nuestro planeta, al final de la época del Eoceno, habitaban mamíferos, anfibios y reptiles, que compartían ambos polos, el Norte y el Sur, reinando por doquier un clima subtropical.
    Posteriormente, durante un periodo de unos cien mil años, las temperaturas continuaron descendiendo significativamente, lo que produjo la desaparición de varias especies animales, la reducción de los niveles del mar y el reforzamiento del citado recubrimiento de hielo en la Antártida. Desde entonces, las capas de hielo marino y polar han influido en el clima, dando lugar a la circulación general atmosférica planetaria de masas de aire, y repercutiendo, no sólo en las temperaturas, sino también en las precipitaciones, los vientos y las demás variables.
    La llegada de aquel hielo antártico fue el origen de todos los posteriores cambios del clima; antes el clima era demasiado cálido como para que se formara y mantuviera una capa de hielo, pero después y desde entonces, las temperaturas se han movido en una banda de valores compatible con el mantenimiento de la creada estructura de hielos polares.
  • Sin embargo el nivel actual de dióxido de carbono, se ha situado peligrosamente en torno a las 400 partes por millón (ppm), un valor que, de momento, permite mantener la capa de hielo antártica. Pero lamentablemente los niveles de CO2 y las temperaturas van en aumento desde hace más de un siglo y los pronósticos sitúan la concentración de gases (GEI) entre 550 y 1 000 ppm para final del siglo en curso.
    Es razonable pensar que si continuamos al ritmo actual de calentamiento global, al final alcanzaremos el punto de inflexión, a partir del cual comenzaría un proceso de retorno al pasado. Este proceso de retroceso llevaría al planeta hacia los climas subtropicales previos, pero el recorrido de ese camino será muy duradero, puesto que entrará en juego el actual hielo antártico, actuando como auténtico climatizador planetario, de forma que, después de cruzar el umbral de fusión sin retorno, se tardarían todavía muchos miles de años hasta que desapareciera la capa de hielo que hoy cubre la Antártida.
    Parece por tanto que el planeta Tierra no está en peligro a lo largo de los próximos milenios, pero… ¿Podemos decir lo mismo de los inquilinos ocupantes del planeta?Ahí es donde aparecen voces discordantes, puesto que el peligro para los ocupantes va a depender de cómo se gestionen los cambios que se van a producir durante el camino, con un importante matiz…
    Lo malo para nosotros es que ese matiz es que esa gestión no dependerá ya de nosotros los inquilinos humanos del planeta, sino del conjunto de los cinco Subsistemas que componen el denominado Sistema Climático, es decir fundamentalmente de las interrelaciones entre atmósfera, litosfera (parte sólida del planeta) e hidrosfera(conjunto de mares y océanos), puesto que los otros dos subsistemas biosfera (conjunto de todos los seres vivos, animales y plantas) y criosfera (el hielo antártico), participarán en el proceso como pacientes sufridores y como paciente climatizador, respectivamente.
    Por nuestro propio bien, que no por el del planeta Tierra que saldrá indemne, esperemos que el Sistema (Climático, naturalmente) sea mejor gestor del cambio de lo que hemos sido nosotros.