martes, 29 de agosto de 2017

BUENOS AIRES

Generan energía solar en el Metrobus
cronista.com

Los instalaron en los techos de dos estaciones sobre la Av. 9 de Julio y generarán energía equivalente al consumo de 190 hogares por año. Es la mayor instalación solar de la Ciudad, después de la que funciona en el Ministerio de Ciencia.

Los paneles son de doble vidrio para dejar pasar la luz e integrarse con la estética de las paradas


En todo el mundo, las ciudades están empezando a generar energía eléctrica a partir de paneles fotovoltaicos en techos de edificios públicos, estacionamientos de autos y paradas de buses. En Buenos Aires, comenzaron a colocar paneles en dos estaciones del Metrobus la Avenida 9 de Julio, con la idea de "generar energía limpia y gratuita que se volcará al consumo de la Ciudad", comentó Eduardo Macchiavelli, ministro de Ambiente y Espacio Público porteño.

Inicialmente, fueron colocados 164 paneles de 240 Watts en la estación Obelisco Sur, y están siendo colocados otros tantos en la estación Obelisco Norte, que producirán durante 30 años la energía equivalente al consumo anual de 190 familias tipo.

Se calcula que estas dos estaciones generarán 110.000 kW por año de energía que se inyectará directamente al sistema eléctrico de la Ciudad Autónoma. El proyecto se utilizará como prueba piloto en el marco de la Ley de Energía Distribuida que está siendo debatido en el Congreso. La normativa promueve que empresas y ciudadanos que generen energía de fuentes renovables puedan volcarla a la red, obteniendo ingresos o un descuento en sus facturas por el servicio eléctrico; algo que ya es posible en provincias como Santa Fe y Salta.

Dada la matriz energética argentina, que actualmente emite más de 400 gramos de CO2 por kWh (principalmente por la combustión de gas importado para generar electricidad), esta instalación evitará la emisión de 44 Toneladas anuales de CO2, el principal gas de efecto invernadero. Esto equivale a sacar de circulación 276 autos nafteros por un año, o a reemplazar más de 46.000 bombitas incandescentes por lámparas de bajo consumo LED.

La inversión en este proyecto es de $ 3.156.698 por parador (incluyendo todos los repuestos para la vida útil del funcionamiento de 30 años) y la instalación fue realizada por la empresa Sustentator Energías Renovables. La firma ha realizado un centenar de instalaciones solares en todo el país y fue una de las responsables de poner en marcha el parque solar Inés Indart de 400 kilowatts (1540 paneles) en el partido bonaerense de Salto, como parte del programa provincial de energía distribuída (Proinged).

Los paneles, importados de Italia, son de doble vidrio y tienen por finalidad dejar pasar la luz solar para lograr una integración con la estética de las estaciones del Metrobús y generar, a la vez, conciencia en los usuarios y vecinos respecto de la sustentabilidad y la utilización de las energías renovables.

La instalación no cuenta, por el momento, con capacidad de almacenamiento de la energía generada durante el día, dado que "las baterías de litio son actualmente muy costosas y deberían cambiarse al menos tres veces durante la vida útil del sistema", explicó Rodrigo Herrera Vegas, fundador de Sustentator. "Como las estaciones del Metrobus ya están conectadas a la red eléctrica, no tiene sentido almacenar la energía para devolverla a la noche, y se optó por aprovecharla directamente en la red".

El objetivo es, en un futuro, extender los paneles a las 17 paradas de Metrobus sobre la 9 de Julio y de este modo (asumiendo que estén libres de sombras de edificios y árboles), se generarían 805 MWh (megawatt/hora) anuales. "Muchas, pero no todas las estaciones de colectivos y del Metrobus tienen condiciones óptimas para aprovechar la energía solar, dado que se debe contar con una superficie disponible, libre de sombra y conectada al sistema eléctrico", destacó Herrera Vegas. La tendencia es que las ciudades aprovechen cada vez más esta oportunidad de generar energía limpia y gratuita, cercana a los puntos de consumo.

lunes, 28 de agosto de 2017

ARGENTINA

Cae la producción de miel por la desaparición de las abejas
diariouno.com.ar

El cambio climático, la utilización de pesticidas y la malnutrición de dichos insectos son las principales causas


Cae la producción de miel por la desaparición de las abejas

La disminución del número de abejas en las colmenas es una problemática global que, por supuesto, tiene su repercusión en Mendoza, donde se registran problemas en torno a la producción de miel y sus productos derivados.

Los principales referentes locales del sector apícola explicaron que se debe a una serie de factores que en mayor o menor medida también ocurren en la provincia, y pidieron políticas de Estado que ayuden a un sector que, además, es importante para el desarrollo de otras producciones.

Dentro de esa cadena de factores, hay uno en el que todos coinciden y es el cambio climático. Los otoños más cálidos y la demora en el ingreso del invierno frío hacen que las abejas no puedan hacer la invernada adecuada para tener una prolongación en su vida.

"Una obrera en verano dura 45 días debido al desgaste que tiene por la cantidad de horas de trabajo (vuelo) que tiene. En invierno, una obrera dura hasta 120 días, pero siempre y cuando sea un invierno frío que las mantenga la mayor parte del tiempo dentro de la colmena, sin gastar energías", explicó Daniel Avena, presidente del Consejo Apícola provincial.

Otro motivo recurrente es el uso de plaguicidas o pesticidas para las producciones frutihortícolas. En Mendoza ese tema está relativamente controlado porque no se realizan fumigaciones aéreas sino que se hacen colocaciones localizadas, por lo que los productores suelen avisarles a los apicultores que retiren sus colmenas a tiempo.

"Es un problema muy grave porque cada vez se aplican más. En los pesticidas dicen que no les hacen daño a las abejas pero no lo creemos, porque si mata a otros insectos por qué no a las abejas", continuó Avena.

El tercer factor es el denominado nutricional, pero también está relacionado a los agrotóxicos. El uso de herbicidas genera que en los montes frutales o de viña ya no existan malezas o yuyos que dan flores, que es justamente de donde las abejas sacan néctar.

"Si vos ponés a las abejas en un solo cultivo, monofloral, por ejemplo solo alfalfa, a la larga tendrá problemas nutricionales. Es como si una persona durante todo un año sólo comiera pan, lo cual le generaría un problema nutricional grave", ejemplificó Pablo Maessen, integrante de la Sociedad Argentina de Apicultores.

La diversidad de flora hace que las abejas puedan recibir polen de distintas especies, lo que les brinda una dieta variada, y en Mendoza existen campos con estas características, por lo que según Maessen, "en Mendoza es poco probable que eso ocurra", aunque admitió que es una de las teorías que explica el síndrome de desaparición de las colmenas.



Varios años de crisis

En lo que coincidieron los referentes del sector apícola es que ya son varios los años de crisis, que la situación se acentúa cada vez más y que solo una política de Estado pensada a largo plazo puede ser la solución.

"El año pasado fue muy complejo, muy duro, porque nos afectaron tremendamente las heladas tardías. Hubo una cosecha de miel muy pobre, quizás la más pobre de la historia de Mendoza. Se cosechó entre un 30% y 40% de lo normal", informó Avena.

En cuanto a la producción de este año, las perspectivas son positivas en relación a 2016, porque hasta ahora hubo buena cantidad de lluvias, la humedad del campo es la adecuada y las colmenas arrancaron bien. Sin embargo, una serie de heladas como las del año pasado podrían volver a arruinar la temporada.

Maessen en tanto consideró que "estamos en un momento clave de la apicultura mendocina" y que es necesario que "el Estado se siente a discutir estos problemas en la mesa de las asociaciones y cámaras de apicultores. No son temas livianos que se arreglan fácilmente con un subsidio o ayuda económica al apicultor. Se le puede encontrar la vuelta, pero hay que sentar a la mesa a los actores, con la idea de armar un plan estratégico a 20 o 30 años. Pero, qué plan se puede armar en Argentina con ese tiempo si sólo se buscan soluciones inmediatas", cerró.

viernes, 25 de agosto de 2017

Instalan autopistas eléctricas en Alemania
latercera.com

Desde esta semana Alemania tiene 10 km de ruta con un sistema de tendido eléctrico muy similar al que utilizaban los trolebuses.

Instalan autopistas eléctricas en Alemania


En la ciudad de Hessia (Alemania) se instaló esta semana un tramo de 10 km en la autopista un tendido eléctrico que proporciona energía eléctrica a los camiones híbridos.

¿Cómo funciona? Los camiones híbridos utilizan dos sistema para circular. El primero, el motor diésel convencional y el segundo un motor eléctrico. En el caso de los vehículos de carga desarrollados por la empresa Scania, éstos tienen un pantógrafo inteligente que al hacer contacto con el lugar desde obtiene electricidad se levanta automáticamente para ser recargado.

Una vez que éste está cargado o camión este cerca de abandonar sector del tendido eléctrico éste desconecta y el motor diésel comienza a funcionar. Este mismo método permite que se devuelva el exceso de carga eléctrica producida cuando el camión frena o cuando se usa el freno del motor.

Dicho sistema es un similar al que usaban los trolebuses, aunque los vehículos de carga hídricos si pueden circular fuera de las líneas eléctricas sin ningún problema, debido a que usan el motor diésel.

Según consignó el diario El País, este sistema tiene la capacidad de hacer circular camiones de entre 40 a 60 toneladas y permitirían una importante reducción en el consumo de combustible y en las emisiones de CO2.

Esta no es la primera vez que se aplica este tipo de sistema. En Suecia funciona hace un tiempo un tramo de 2 kilómetros en la autopista E16, dicha medida forma parte de un proyecto que se realiza para prescindir de los combustibles fósiles en 2030.

Además el sistema de autopistas eléctricas también han sido aplicados en el transporte urbano, en ciudades como Hamburgo (Alemania) y St. Moritz (Suiza) donde se han instalado pantógrafo en los paraderos de los llamados eBus. Acá la electricidad se almacena en la batería de los autobuses cuando los pasajeros suban y bajan del vehículo.

jueves, 24 de agosto de 2017

Cómo cuidar la biodiversidad de los agroecosistemas
lacapital.com.ar

Especialistas del Inta plantearon la necesidad de incrementar la rotación de los cultivos y también promovieron la importancia de los cultivos de cobertura.


Sistemas. En Marcos Juárez se obtuvieron importantes beneficios en la rotación soja-sorgo.


La rotación de los cultivos para favorecer la biodiversidad de los agroecosistemas es todavía una tarea pendiente, y es una estrategia fundamental para la sobrevivencia de los sistemas productivos. La fertilización, la incorporación de nutrientes también incrementan la biodiversidad de los sistemas pero no reemplaza en su totalidad los beneficios de una adecuada rotación de cultivos, imprescindible para una agricultura sustentable. En ese contexto, aparecen los cultivos de cobertura como una opción más para colaborar con este camino.

En Argentina la demanda mundial de alimento y los cambios en los mercados internacionales han producido un impacto sustancial en los sistemas rurales productivos, donde la agricultura ha mostrado un sustancial proceso de extensión e intensificación en los últimos 30 años. La tecnología y manejos implementados en las actividades agropecuarias y agroindustriales impactan en la interface ambiente-sociedad. Los efectos más directos incluyen la pérdida de nutrientes, el desequilibrio de los ciclos biogeoquímicos, la contaminación, la erosión, la pérdida de biodiversidad y todos los procesos ecológicos que contribuyen a un agroecosistema resiliente y sostenible.

Durante el congreso de Aapresid que se realizó hace unos días en Rosario, el ingeniero agrónomo Fernando Salvagiotti, Investigador del Inta en la Estación Experimental Oliveros, planteó que es posible una intensificación sustentable, producir más y hacer un uso eficiente de los recursos, mantener e incentivar la biodiversidad del suelo, el agua, la atmósfera y además reducir y evitar procesos de contaminación.

Salvagiotti contó algunos de los ensayos que realizaron en el Inta para evaluar el impacto de la rotación de cultivos. Se realizaron 54 ensayos para evaluar diferentes sistemas de producción y en diferentes ubicaciones. En es sentido, destacó los beneficios obtenidos en Marcos Juárez al hacer soja-sorgo.

"La rotación tiene efectos positivos sobre los cultivos reduciendo procesos de contaminación como óxido nitroso", apuntó.

Miriam Barroco, investigadora del Inta de la Estación Experimental Agropecuaria General Villegas, habló de los cultivos de cobertura como una opción para conservar la biodiversidad. Planteó el impacto beneficioso de las gramíneas como el centeno, la avena, el trigo, raigrás, cebada, triticale, cebadilla y tricepiro.

La especialista propuso para el uso eficiente del agua al centeno y dijo que para los sistemas productivos con exceso hídrico dijo que hay que buscar una gramínea que consuma el agua lo más posible y una alternativa es raigrás.

En un segundo nivel, sugirió las leguminosas como vicia villosa, vicia sativa, melilotus y trébol persa. También mencionó a las crucíferas como nabo s, colza y tillage radish y la mezcla de especias: gramínea más leguminosa, gramínea más crucífera, gramínea más gramínea o multiespecias.

"Hay mucho por recorrer y ver nuestro sistema como encaja y que beneficios aportan los cultivos de cobertura", indicó Barroco durante su presentación en Aapresid.

En cuanto a los beneficios registrados en los ensayos, la investigadora dijo que en Córdoba y en San Luis con centeno lograron frenar la erosión eólica de los suelos con más de 80% de arena. Se disminuyó 30% la erosión.

Como recomendación, Barroco sugirió "sacar una palada y ver el suelo" para analizar qué hacer y analizar si es conveniente un cultivo de cobertura. Si finalmente este es el camino elegido, apuntó que matar el cultivo con rolo, no con químicos, es una muy buena alternativa.

"No hay recetas, hay que preguntarse para que lo vamos hacer y dónde. Un cultivo mal manejado puede afectar al siguiente. Hay que ver el principal problema, no le podemos pedir todo al cultivo de cobertura. Es una herramienta más que tiene que ser complementada con rotación. De a poco hay que meter el resto de los cultivos en al secuencia", subrayó Barroco.

En suma, como síntesis del panel se destacó: "Destruir es fácil, construir es más complicado".

viernes, 18 de agosto de 2017

Glaciares: el país tiene el segundo reservorio de agua de América del Sur
lanacion.com.ar

Sólo lo supera Chile; la Argentina posee 15.691 áreas estratégicas, según cifras preliminares del Inventario Nacional de Glaciares; son 5748 km2 de hielo permanente; es 28 veces la superficie de la ciudad

Glaciar Horcones Superior. Mendoza
Glaciar Horcones Superior. Mendoza. Foto: IANIGLA

Dejó de ser una cuestión de límites difusos o un debate por aproximación para rechazar actividades extractivas en áreas estratégicas. Siete años después de la promulgación de la ley de glaciares (26.639), que dispone la creación del Inventario Nacional de Glaciares (ING), la Argentina puede ahora certificar, con validación científica, que atesora al menos 15.691 glaciares a lo largo de la cordillera de los Andes y que es el segundo país de América del Sur, después de Chile, entre los de mayores reservas estratégicas de agua dulce en estado sólido.

También puede jactarse de haber individualizado y situado por primera vez en el mapa el grueso de los glaciares argentinos y su ambiente periglaciar, a partir de un relevamiento inédito que no sólo contribuye a preservarlos y a controlar las actividades en los territorios, sino también a estudiarlos y monitorearlos para comprender los alcances del cambio climático.Según datos preliminares del ING, el conjunto de cuerpos de hielo de más de una hectárea de superficie presentes en nuestro suelo suman una superficie de 5748 km2 y representan un 22,5% del total de la masa glaciar de América del Sur (25.550 km2).

Chile, por caso, triplica esa extensión. Baluartes paisajísticos, cumplen un rol clave como proveedores de agua para la recarga de las cuencas hídricas en épocas de sequía, lo que garantiza el desarrollo de las actividades humanas.

El total de las masas de hielo permanente, producto de la recristalización de las precipitaciones de nieve en invierno, combinado con bajas temperaturas en verano, equivale en su conjunto a 28 veces el tamaño de la ciudad de Buenos Aires.

Así surge del estudio iniciado en 2012 por el Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (Ianigla-Conicet), que también confirmó lo que se sospechaba: los glaciares argentinos exhiben un retroceso generalizado, por efecto del cambio climático y de otras variables. Esa constricción se alinea con lo observado en los glaciares a nivel mundial.

El inventario, que pocos países en el mundo han concluido, cumple un rol fundamental en el planeamiento estratégico de 12 provincias con presencia de glaciares y ambiente periglaciar que, ahora, ya relevados y localizados, deberán restringir toda actividad minera en esas cuencas y monitorear otras que puedan afectarlos.

El ING contribuirá también a la base de información del World Glacier Monitoring Service de la Unesco, para estudiar a gran escala el estado de la criosfera y la dinámica del calentamiento global.

Para entender la dimensión de este logro científico basta decir que mediante expediciones a la Cordillera se han estudiado y relevado in situ más de 1000 glaciares desde Jujuy hasta Santa Cruz y se han descubierto cuerpos de hielo (de escombros, cubiertos o descubiertos) desconocidos hasta ahora.

"El aporte del Ianigla al país y al Programa de las Naciones Unidas para el Ambiente es una contribución a la ciencia a nivel mundial que coloca a la Argentina en el selecto grupo de 38 países que alimentan esa base de datos", dijo Sergio Bergman, ministro de Medio Ambiente, órgano nacional de aplicación de la ley de glaciares.

"Hoy podemos saber en qué lugar exacto se encuentran, qué extensión tienen y sus especificidades. Utilizamos una misma metodología para todo el país, por lo que el estudio es considerado uno de los mejores inventarios de glaciares a nivel mundial", explicó Roig a LA NACION.

Dividido en cinco grandes regiones (Andes desérticos para Jujuy Salta, Catamarca, La Rioja y San Juan; Andes centrales: San Juan y Mendoza; Andes del norte de la Patagonia: Río Negro y Chubut; Andes del sur de la Patagonia: Santa Cruz, y Andes de Tierra del Fuego e islas del Atlántico Sur), el ING muestra que la Patagonia austral concentra casi el 60% de la superficie de glaciares argentinos (3422 km2), pero sólo el 15,4% en cantidad de glaciares (2420).

Los Andes centrales albergan el 31,2% de la superficie de hielo (1767 km2) y el 51,4% del total de los glaciares (8078), precisa el informe.

Si bien la ley exige publicar el ING completo, la falta de delimitación geográfica con Chile en el área de los hielos continentales -unos 200 km que van desde el monte Fitz Roy hasta el cerro Daudet- ha obligado a la Cancillería a retener y a no difundir el relevamiento que se ocupa de un lugar sensible: la cuenca del río Santa Cruz.


El Glaciar Perito Moreno
                El Glaciar Perito Moreno.

"Hasta que se consensuen los límites fronterizos, la ley especifica que no pueden divulgarse", dijo una fuente de la Cancillería. Añadieron que una comisión binacional deberá trazarlos con técnicos y peritos de campo, según el acuerdo de divisoria de aguas en las altas cumbres suscripto por ambos países en 1998.

Recién entonces se podrá difundir esa parte del ING, que reclaman ONG ambientalistas y expertos para poder evaluar con exactitud los impactos del cuestionado proyecto hidroeléctrico Kirchner-Cepernic.

Los hielos continentales, también llamados campo de hielo sur, ocupan unos 12.100 km2, de los cuales unos 3055 km2 corresponden a territorio argentino. Esa área, la más extensa en glaciares del país, situada en la cuenca del río Santa Cruz, posee 1089 glaciares.

El dato -desconocido hasta ahora- es relevante por las represas. El estudio de impacto ambiental no pudo sopesar esa información.

Esa cuenca también atesora los glaciares de mayor tamaño de la Argentina -consigna el ING-, como Upsala (786 km2), Viedma (737 km2), Perito Moreno (244 km2), Spegazzini (127 km2) y Agassiz-Bolados (78 km2).

La extensión, sin embargo, no determina la importancia estratégica de las reservas hídricas, explica Fidel Roig. Hay "pequeños glaciares en los Andes áridos que pueden tener mayor importancia en ese sentido por presentar una gran variabilidad climática (alternancia de años húmedos con años muy secos), y es allí donde los glaciares cumplen un papel trascendental como reguladores interanuales del escurrimiento hídrico", dice el Ianigla.

"El agua es almacenada en estado sólido durante los años húmedos (superávit hídrico) y es entregada a los sectores más bajos de la cuenca en los años secos, cuando los caudales de los ríos son muy reducidos y la demanda por el agua es mayor".

Glaciar cubierto del Tunuyán. Mendoza
               Glaciar cubierto del Tunuyán. Mendoza. Foto: IANIGLA


Cambio climático

Considerados la voz de alarma del calentamiento global, la retracción de su masa en diversas regiones del planeta fue la primera expresión ambiental detectada por los científicos para señalar cambios en las temperaturas a escala global. Sin embargo, "no es sencillo señalar un glaciar que esté siendo afectado por cambio climático y otro que no, ya que los impactos en el balance de la masa de hielo obedecen a una convergencia de factores que van desde el aumento de la temperatura hasta la variabilidad del clima y precipitaciones, la geometría de la cuenca montañosa donde se ubican, la altitud y pendiente, entre otros factores", explicaron los investigadores.

Analizados los cambios climáticos en la Cordillera, el Ianigla observó que los aumentos de la temperatura han sido más intensos a mayores elevaciones, por lo que los glaciares ubicados en los sectores altos de las montañas han sido fuertemente afectados.

También detectaron "retracciones marcadas en sectores de los Andes centrales y en el norte de la Patagonia, donde la temperatura ha aumentado y las precipitaciones han disminuido". El informe señala también que "los glaciares ubicados a más bajas elevaciones y que terminan en cuerpos de agua, como el Upsala o el Ameghino, han sufrido retracciones de varios kilómetros durante las últimas décadas".

Para cuantificar los retrocesos, el Ianigla dispuso el monitoreo constante con el máximo nivel de detalle de cinco glaciares accesibles y transitables en las distintas regiones para estudiarlos en su relación con el clima. "Al conocer el funcionamiento de un glaciar representativo por región -detalló Roig- es posible generalizar los resultados a otros similares. Para ese fin se seleccionaron los glaciares Agua Negra (30°10'S), Azufre (35°17'), Alerce (41°10') y De los Tres (49°16')". Allí se instalarán estaciones meteorológicas. Mientras resta definir el del extremo sur, los glaciares antárticos, que junto con Groenlandia constituyen las mayores reservas de agua del planeta, quedan fuera del inventario, ya que su monitoreo está sujeto a los compromisos ambientales del Tratado Antártico.

Consultados sobre la incidencia de la mina de Veladero, operada por Barrick Gold, que produjo un derramamiento de cianuro en la cuenca del río Jachal, fue el Mayds el que aseguró tras revisar el inventario que "la mina no se encuentra sobre ningún glaciar o geoforma periglaciar".

Y aclaró: "Sí surge que hay cuerpos con hielo en sus cercanías, por lo que se interpusieron consultas ambientales a la provincia de San Juan que al no ser contestadas derivaron en una medida cautelar de la actividad minera. Se espera una resolución de la justicia federal.

Glaciar De Los Tres. El Chaltén. Santa Cruz
               Glaciar De Los Tres. El Chaltén. Santa Cruz. Foto: IANIGLA

jueves, 17 de agosto de 2017

Encuentran casi 100 nuevos volcanes debajo de la capa de hielo de la Antártida
actualidad.rt.com

La altura de los recientemente descubiertos volcanes va de 100 a 3.850 metros.

Encuentran casi 100 nuevos volcanes debajo de la capa de hielo de la Antártida
El volcán Wannabe en la isla Aspland, Antártida.


Científicos de la Universidad de Edimburgo (Escocia, Reino Unido) han llevado a cabo una investigación y descubrieron que la mayor región de volcanes en la Tierra, con 91 volcanes que se encuentran dos kilómetros debajo de la superficie de la inmensa capa de hielo que cubre la zona oeste de la Antártida. Estos volcanes se unen a los 47 ya encontrados en el mismo sector durante el siglo anterior.

Los picos activos se encuentran en una región conocida como el sistema de grietas del oeste de la Antártida, que se extiende por 3.500 kilómetros desde la barrera de hielo de Ross hasta la península Antártica. Además de tener una altura de entre 100 y 3.850 metros, los volcanes recientemente descubiertos están cubiertos de hielo, con capas de más de 4 kilómetros de espesor.

Aunque las erupciones volcánicas pueden no llegar a la superficie, podrían derretir el hielo desde abajo. "Si uno de estos volcanes entrara en erupción, podría desestabilizar aún más las capas de hielo del oeste de la Antártida", afirmó el experto en glaciares Robert Bingham, uno de los autores del estudio, según recoge el diario 'The Guardian'



Los científicos sostienen que hay aún más volcanes en el fondo del mar que se encuentra bajo la barrera de hielo Ross. "Creo que es muy probable que esta región se convierta en la más densa de volcanes en el mundo", señaló el autor.

La actividad de estos volcanes podría tener consecuencias para el resto del planeta. Si uno de ellos entrara en erupción, podría desestabilizar aún más algunas de las capas de hielo de la región, que ya han sido afectadas por el calentamiento global. "Solo no sabemos qué tan activos han sido estos volcanes en el pasado", subrayó Bingham.

miércoles, 16 de agosto de 2017

La migración estival por el Estrecho de Gibraltar alcanza ya un paso semanal de 40.000 aves
larazon.es

La cigüeña blanca y el milano negro son las especies ornitológicas que en mayor número siguen esta ruta migratoria
Resultado de imagen para cigueña blanca y milano negro

La migración estival de aves por el Estrecho de Gibraltar, denominada postnupcial porque la realizan especies que se han reproducido en primavera en Europa y que ahora bajan a África para invernar, ha alcanzado en agosto su ritmo de crucero con el paso de unos 40.000 ejemplares a la semana.

La cigüeña blanca y el milano negro son las especies ornitológicas que en mayor número siguen esta ruta migratoria, una de las más importantes del mundo, pues suman en cada migración censos de más de cien mil individuos, según los datos que diariamente toman los observadores de la Fundación Migres desde 1997.

En la semana del 24 al 30 de julio se censó el paso de 28.365 cigüeñas blancas y de 12.139 milanos negros; entre el 31 de julio y el 6 de agosto, de 17.688 y de 22.813 ejemplares, respectivamente, y entre el 7 y el 13 de agosto, de 10.211 y de 24.720 ejemplares de cada especie, según los datos de la Fundación Migres analizados por Efe.

Águila calzada, con casi mil ejemplares en las tres últimas semanas, Águila culebrera, con más de quinientos y buitre leonado, con más de cuatrocientos individuos son otras de las especies con un mayor flujo migratorio hacia África en esta época del año.

Esta ruta migratoria es seguida dos ves al año -el paso migratorio prenupcial, para reproducirse en Europa, de febrero a mayo, y el postnupcial, para invernar en África, entre julio y octubre- por centenares de miles de ejemplares de medio centenar de especies ornitológicas, tanto de aves planeadores, las de gran tamaño que vuelan aprovechando las corrientes térmicas -cigüeñas, buitres y rapaces- como de pequeños pájaros paseriformes.

También una docena de aves marinas migran anualmente a través de Gibraltar, pero en vez de cruzar entre Europa y África, su ruta las lleva del Atlántico al Mediterráneo y viceversa.

La existencia de fuertes vientos en el Estrecho, que apenas dista 14 kilómetros entre África y Europa en su punto más corto, causa un efecto embudo que concentra miles de aves en la zona, lo que facilita su observación y censo.

Además de los cientos de miles de ejemplares de cigüeña blanca y milano negro, también se censan anualmente varias decenas de miles de abejeros europeos y de águilas culebreras y calzadas.

Cigüeñas negras, gavilanes, alimoches, buitres leonados, aguiluchos laguneros y cenizos, águilas pescadoras y cernícalos primillas completan la lista de principales especies ornitológicas que cubren esta migración.

Fue Francisco Bernis, considerado uno de los padres de la ornitología española, quien a mediados del siglo pasado comenzó a anotar el paso de aves por el Estrecho de Gibraltar desde diversos observatorios, que hoy día siguen siendo punto de observación de este fenómeno.

Estos conteos diarios del paso de miles de aves por el Estrecho de Gibraltar, empleando siempre los mismos observatorios y el mismo horario, se han consolidado como una de las mayores bases de datos ornitológicas del mundo y como una potente herramientas para el estudio de fenómenos como el impacto del cambio global, ya que las aves son muy sensibles a las alteraciones derivadas del cambio climático o de la alteración de hábitats.

Los observadores de la Fundación Migres disponen ya de series históricas que evidencian cambios en los patrones de la migración de casi todas las especies de aves, descontados los efectos de la variabilidad climatológica de cada año.

Y también han constatado en los últimos años la cada vez más frecuente observación de especies típicamente africanas que se adentran con mayor frecuencia y en mayor cantidad en la orilla española del Estrecho como el busardo moro, el buitre moteado o el halcón borní, de los que se han identificado cuatro, cinco y siete ejemplares en las res últimas semanas, respectivamente. EFE