miércoles, 4 de noviembre de 2015

¿Por qué las hojas de los árboles cambian de color en otoño?
bbc.com

Árboles en otoño
El momento en que los árboles comienzan a decolorarse depende de cada especie.

Estamos en otoño en el hemisferio norte, y más allá del calendario, lo que hace evidente que el verano ya quedó atrás es el cambio de colores en las hojas de los árboles.
Lentamente el verde se va esfumando para dar paso a los amarillos, los ocres, los rojos y los naranjas. Y para cuando llegue el inverno, la mayoría de los árboles ya habrán perdido sus hojas.
¿Pero a qué se debe el cambio de coloración? ¿Y por qué algunos árboles siguen manteniéndose verdes?
Son varios los factores que influyen en estos cambios pero el fundamental es la menor disponibilidad de luz solar.

Un pigmento que desaparece y otros que se dejan ver
La mayoría de las hojas son de color verde por la presencia de clorofila, un pigmento que participa en el proceso de fotosíntesis.
Gracias a la clorofila, las hojas convierten la luz solar, el dióxido de carbono y el agua en azúcares que viajan por el interior de las ramas y las raíces para alimentar al árbol.
Árboles en otoño
Image captionCuando la clorofila desaparece, los pigmentos naranjas y amarillos se dejan ver.
Para que haya producción de clorofila hace falta temperaturas cálidas y luz solar.
Por esta razón, es durante la primavera y el verano que la clorofila se descompone y se vuelve a formar.
Pero cuando los días se van acortando y las noches haciendo más largas, la producción de clorofila se va deteniendo hasta que la planta ya no la produce más, y eventualmente se queda sin clorofila.
Esto se traduce en la desaparición del color verde.Y una vez que este pigmento ya no está, lo que se ven son los otros pigmentos que siempre han estado allí y que le dan a la hoja una tonalidad amarilla o naranja.
Antes no los veíamos porque estaban "enmascarados" por la clorofila.
Según explica Mark Fischetti, editor de la revista Scientific American, los colores rojizos tienen otra explicación: a medida que se cierran las venas de las hojas con el comienzo del otoño, los azúcares quedan atrapados dentro de las hojas.
Cuando estos reaccionan con otras sustancias químicas en el interior de la planta, se forman los pigmentos rojos.

Las sobrevivientes
El momento en que cada planta empieza mudar de color cambia según la especie, pero la intensidad de los colores -hay años en que los colores parecen más vibrantes que otros- está vinculada al clima, sobre todo a la temperatura y la humedad.
Días cálidos y soleados con noches frías pero no heladas producen una gama de colores brillantes, porque más azúcares se quedan atrapados en la hoja.
Al cambio de coloración le sigue la caída de las hojas.
Árboles en otoño
La magia del otoño está precisamente en el cambio de tonalidades de los árboles.
A medida que se van acumulando células en la base de cada hoja se van cerrando las venas que llevan los nutrientes desde y hacia las hojas, hasta que estas eventualmente se caen.
Así el árbol se deshace de sus hojas que de otra manera seguirían consumiendo el agua que la planta necesita para mantener sus raíces vivas durante el invierno.
Dicho esto, no todas las hojas de los árboles cambian de coloración y se caen.
Las hojas de los árboles de hojas perennes tienen un recubrimiento seroso y tienen menos superficie, lo cual reduce la pérdida de agua.
Por otra parte contienen una sustancia química anticongelante que les permite a las raíces y a las hojas sobrevivir durante el invierno.

martes, 3 de noviembre de 2015

Corea del Norte muestra su primer autobús de energía solar
informador.com.mx

El vehículo, de aspecto antiguo, tiene el techo cubierto con 32 paneles solares; puede alcanzar una velocidad de hasta 40 kilómetros por hora

En los últimos años, la energía solar fotovoltaica está despertando un creciente interés en el país. ESPECIAL /


SEÚL, COREA DEL SUR.- Corea del Norte presentó hoy en la televisión estatal el que sería su primer autobús alimentado con energía solar, como parte de la estrategia del país de potenciar las energías renovables para reducir su costosa dependencia del petróleo. 

La televisión central norcoreana (KCTV) mostró imágenes de un autobús de aspecto antiguo con el techo completamente cubierto de paneles solares en la ciudad de Nampo, unos 40 kilómetros al suroeste de la capital, Pyongyang. 

El vehículo, explicó el medio estatal, está equipado con 32 paneles solares de 100 vatios, 50 baterías y un motor eléctrico de 50 kilos, y es capaz de alcanzar una velocidad de hasta 40 kilómetros por hora. 

La KCTV no explicó, sin embargo, si el autobús está propulsado exclusivamente por energía solar o posee un sistema híbrido. 

En todo caso, se trata de la primera vez que el régimen de Kim Jong-un muestra un vehículo con paneles solares. 

En los últimos años, la energía solar fotovoltaica está despertando un creciente interés en Corea del Norte, donde se han comenzado a ver paneles en algunas casas y edificios públicos, y los medios han hecho referencia al apoyo del Gobierno a esta fuente de energía. 

Pyongyang trata de reducir su dependencia del petróleo pues lo tiene que importar de China y otros países, lo que supone un elevado coste para su economía de planificación estatal, caracterizada por la falta de competitividad en el mercado internacional. 

Además de arrastrar una constante crisis desde los años 90 del siglo pasado, la economía norcoreana sufre los efectos de las sanciones sobre el comercio impuestas por el Consejo de Seguridad de la ONU como respuesta a los múltiples ensayos nucleares y de misiles del militarizado régimen. 

Aún así, desde que Kim Jong-un llegó al poder a finales de 2011 se han observado progresos tanto en tecnología como en infraestructuras en todo el país, si bien persiste el problema de la escasez de alimentos que afecta a gran parte de la población.

lunes, 2 de noviembre de 2015

Ardillas, caracoles o ranas, ya hay más de 600 especies invasoras exóticas en el país
infonews.com

Un registro de la Secretaría de Medio Ambiente documentó 653, que llegaron en algún momento originando efectos irreversibles en los ecosistemas autóctonos y las economías regionales. Introducidas en el territorio de manera voluntaria o accidental, son animales y plantas con un gran poder de dispersión. Sin depredadores naturales, amenazan la biodiversidad nativa.

Ardillas, caracoles o ranas, ya hay más de 600 especies invasoras exóticas en el país
Ardillas, caracoles o ranas, ya hay más de 600 especies invasoras exóticas en el país


El castor en Tierra del Fuego, ardillas en Luján, ligustrina en las yungas de Jujuy, tamarindos en el sur de Mendoza, el caracol africano en Misiones. Todas estas especies tienen algo en común: “invadieron” en algún momento a nuestro país y originan efectos irreversibles en los ecosistemas autóctonos y en las economías locales. “En la Argentina hay más de 600 especies exóticas invasoras”, confirma el secretario de Ambiente de la Nación, Sergio Lorusso. Ya son la segunda causa de pérdida de biodiversidad, extinguiendo a nivel planetario el 39% de las especies.
Según consignó Tiempo Argentino, pueden ser animales, plantas, hongos, microorganismos. Los registros de la Argentina documentan la presencia de 653 especies exóticas colonizando ambientes naturales en las 18 ecorregiones del país. Desde luego, no todas las exóticas son invasoras. Cuando una especie introducida fuera de su área de distribución natural –de manera voluntaria o accidental– presenta una alta tasa de crecimiento y un gran poder de dispersión, sumadas a la falta de enemigos naturales, y provoca una rápida ocupación expansiva del territorio, amenazando la biodiversidad nativa; ahí pasa a ser una “invasora”. La globalización del comercio y el turismo, además del cambio climático que reduce la resistencia natural de los ecosistemas, no ayudan a disminuir el fenómeno.
“Muchas enfermedades están asociadas a ellas: el dengue, el cólera, y también enfermedades parasitarias como las que transmite el caracol africano gigante, en el Noreste”, acota Sergio Zalba, profesor del Departamento de Biología, Bioquímica y Farmacia de la Universidad Nacional del Sur.

Lo del Castor canadensis resultó ser tan invasivo en Tierra del Fuego que no sólo hay un proyecto binacional con Chile para controlarlo, hasta le dedicaron un documental: "Castores, la invasión del fin del mundo".

Lorusso da ejemplos: “Las carpas se dispersaron por todo el territorio y tuvimos que duplicar la siembra de pejerrey. En el sur es donde más se ve este fenómeno de introducción de especies exóticas.” El alga didymo, la liebre europea, el estornino, el visón americano y la abeja africana completan una lista con final abierto.
“Por lo general, se toma conocimiento de la liberación de una especie que no es autóctona cuando ya está establecida, colonizando o expandiéndose –cuenta Claudio Bertonatti, asesor de la Fundación de Historia Natural Félix de Azara–. Suele ser tarde para resolver el problema en su etapa menos compleja.” Algunas logran triunfar en la batalla cultural: el ciervo colorado tiene monumentos en Bariloche y en el lago Lácar, sitios donde no se homenajea al huemul o el pudú, autóctonas contra las que compite.
En el norte del país, un proyecto de control apunta a la rana toro, anuro nativo de América del Norte que domina 40 países de cuatro continentes, lo que le valió ser incluida por la Unión Internacional para la Naturaleza entre los 100 organismos exóticos invasores más perjudiciales del mundo. Aquí llegó en 1983 desde Brasil, a raíz de la fallida ranicultura. El problema es que se trata de un depredador con características dignas de protagonizar una película de Spielberg: adultos de gran tamaño, alto potencial reproductivo, resistencia al invierno, larvas que producen secreciones tóxicas, sin depredadores naturales fuera de su área de origen. La rana toro transmite patógenos que matan a otros anfibios y se alimenta de cualquier animal que sea menor a su talla.
El peligro rojo llegó a la localidad de Jáuregui (partido de Luján) en 1970, desde el sudeste asiático. Los primeros cinco ejemplares de ardilla de vientre rojo formaron una población silvestre que se expandió de forma natural hasta Córdoba y Santa Fe, ayudada por personas que la pensaron como mascota. Pero más allá de que su tenencia es ilegal, se equivocaron: estas ardillas muerden, no resisten el cautiverio y pueden transmitir enfermedades. Cuando sus desencantados dueños las liberan al medio silvestre, producen daños severos a los árboles; consumen flores, frutos y semillas afectando la reproducción de la flora autóctona; matan aves; causa daños en cultivos y sistemas de riego; y hasta destruyen cables de teléfono, luz y tevé. Ya están en condiciones de colonizar el Delta del Paraná.
Por fin, lo del Castor canadensis resultó ser tan invasivo en Tierra del Fuego que no sólo hay un proyecto binacional con Chile para controlarlo, hasta le dedicaron un documental, estrenado en junio: Castores, la invasión del fin del mundo. Apenas 20 llegaron desde Canadá a la Isla Grande en 1946, con fines peleteros, y se encontraron en un ambiente sin un controlador natural o depredador como en su tierra natal. Además, en sus primeros 35 años aquí, su caza estuvo prohibida. La colonia creció, colonizó canales, arroyos y ríos, cruzó el Estrecho de Magallanes y arribó a la península chilena Brunswick. Comen árboles históricos del Bosque Patagónico hasta tirarlos. Cambian los fluidos de las cuencas, producen inundaciones, eliminan especies. Actualmente son más de 150 mil, más que las personas, y se calcula que en un cuarto de siglo podrían llegar a Bariloche.

LUCHA SIN CUARTEL

La Estrategia Nacional sobre Especies Exóticas Invasoras que promueve la Secretaría de Ambiente de la Nación se desarrolla gracias al aporte estatal de unos $ 180 millones y una donación de casi 4 millones de dólares del Fondo para el Medio Ambiente Mundial.

UN COSTO ENORME

A nivel mundial las especies exóticas invasoras son responsables de la pérdida del 5% del PBI Global, según las cuantificaciones realizadas por los países que cuentan con estrategias nacionales. EE UU calcula que pierde aproximadamente 120 mil millones anuales y Brasil 42.600.

Hormigas for export

Nuestro país también exporta especies invasoras. Por ejemplo, la “hormiga argentina”, oriunda del noroeste, que hace estragos en California (Estados Unidos) y en España. Llegó a Portugal en el siglo XIX en un buque de carga y hoy es plaga, con más de 6000 kilómetros de hormigueros interconectados, desplazando o exterminando a las especies autóctonas del Mediterráneo. La “argentina” se distingue por su gran organización y la presencia de múltiples reinas. En el extranjero, las hormigas argentinas cooperan entre sí. Aquí se pelean, pero tienen depredadores que en Europa y EE UU no existen.

Un ave bajo amenaza

En Santa Cruz habita el Macá Tobiano, ave buceadora descubierta hace apenas 40 años. Esa zona árida y helada es su único refugio en el planeta, pero podría extinguirse por completo en la próxima década. Ignacio “Kini” Roesler, biólogo de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA y becario del CONICET, dio la voz de alerta en 2012. De los casi 5000 registrados en los ’80, quedaban apenas unos 800. Pasó a ser la primera especie endémica de la Argentina en peligro crítico. Una de las razones es el visón americano, una especie exótica capaz de matar a 33 macaes que debían estar reproduciéndose.

Efectos colaterales del pino

La flora invasiva puede generar aún más efectos negativos que la fauna. Como ejemplos están las gigantescas algas Wakame que hacen estragos en Chubut, tras ingresar por el tráfico naviero en Puerto Madryn. A veces, el propio ser humano las introduce. Una investigación de la Facultad de Agronomía de la UBA, llevado a cabo por Amy Austin, profesora de la cátedra de Ecología y ganadora del Premio L’Oréal-UNESCO 2015, reveló un sorprendente efecto colateral de las plantaciones exóticas de pino ponderosa en la Patagonia: tras casi 35 años, las áreas forestadas carecen de hormigas. Se fueron ante la falta de plantas autóctonas a las que estaban acostumbradas.

jueves, 29 de octubre de 2015

Espectáculo astronómico: Marte, Júpiter y Venus se alinean por última vez hasta 2021
actualidad.rt.com

El 'desfile de tres planetas': Marte, Júpiter y Venus

El espectacular fenómeno de conjunción planetaria entre Venus, Júpiter y Marte podrá verse durante toda la semana, pero la alineación más impresionante de los tres cuerpos celestes tendrá lugar entre el jueves y el viernes. El acontecimiento no se repetirá hasta 2021.

Un 'trío' de planetas comparable según algunos científicos con la legendaria Estrella de Belén. Un espectáculo que no volverá a repetirse hasta 2021. Gracias a la poca distancia a la que se situarán Venus, Júpiter y Marte cualquier aficionado a la astronomía podrá disfrutar de este fenómeno sin necesidad de usar equipamiento especial, aunque los dispositivos ópticos ayuden a observar el fenómeno de una manera más precisa.

El único elemento que puede estropear la observación de los planetas es la situación meteorológica. En buenas condiciones climáticas solo pudiera escapar de nuestra vista Marte, el planeta menos brillante de los tres. Venus, por su parte, brilla 12 veces más que Júpiter. En la madrugada del próximo 30 de octubre será posible ver este dúo planetario en todo su esplendor desde cualquier punto geográfico de la Tierra.

miércoles, 28 de octubre de 2015

No mas autos en la capital de Noruega. Prohiben la circulación de vehículos con motor de combustión interna
diarioecologia.com

oslo

Oslo se convierte en la primera gran ciudad europea que adopta una respuesta drástica contra la contaminación atmosférica provocada por el tráfico motorizado.
El nuevo equipo de gobierno del Ayuntamiento de Oslo (Noruega), formado por el Partido Laborista, los Verdes y la Izquierda Socialista, ha aprobado un acuerdo de coalición para el periodo 2015-2019 en el que se prevé, entre otras medidas contra la contaminación atmosférica, la prohibición de circulación de vehículos privados con motor de combustión en el centro de la ciudad en tan solo cuatro años.
El nuevo consejo de la ciudad ha dado luz verde al proyecto destacando que la prohibición de circular en vehículo privado por el centro de la ciudad beneficiará a todos los ciudadanos sin afectar de forma substancial a las empresas y comercios ubicados en la capital. La prohibición no afectará a los vehículos que conducen o transportan personas con discapacidad, ni los vehículos que transportan mercancías a los comercios.

Así afecta al cuerpo humano la contaminación ambiental

“Queremos tener un centro sin coches”, destaco Lan Marie Nguyen Berg, portavo del Partido Verde en Oslo, “Queremos que la capital sea los peatones y los ciclistas; y esto será mejor también para los comercios y el conjunto de la población”.
El acuerdo de gobierno incluye la construcción de al menos 60 kilómetros de carriles para bicicletas antes del 2019, la fecha de las próximas elecciones municipales; y proporcionar un “gran impulso” de la inversión en transporte público. Antes de poner en práctica la medida y delimitar la zona de circulación prohibida, el equipo de gobierno tiene previsto realizar consultas con los vecinos y afectados.

martes, 27 de octubre de 2015

Hay 422 árboles por persona en la Tierra; más de lo esperado, menos de lo deseable
lanacion.com.ar

En la Argentina la superficie de bosques se ha reducido drásticamente en los últimos años; reclamos por la falta de fondos a la ley que los protege

Una vista de la deforestación en el Amazonas
Una vista de la deforestación en el Amazonas.Foto:AFP


En el mundo hay 422 árboles por persona, en promedio. Esto es 7,5 veces más de lo que se pensaba. Sin embargo, cada año se pierden 15.000 millones de ejemplares. Y, desde que comenzó la civilización humana, el número cayó un 46 por ciento.

Estas cifras, que fueron dadas a conocer en la revista Nature tras una investigación de la Universidad de Yale, toman especial interés a un mes de que se celebre la cumbre contra el cambio climático en París, a fines del mes próximo. En especial cuando la deforestación es una de las causas comprobadas de generación de gases de efecto invernadero.

Usando una combinación de imágenes de satélite, inventarios forestales, y tecnologías de supercomputación, el equipo internacional de investigadores fue capaz de mapear las poblaciones de árboles en todo el mundo a nivel del kilómetro cuadrado. Como resultado global, la investigación detectó 3.04 trillones de árboles. Las mayores densidades de árboles se encuentran en los bosques boreales en las regiones subárticas de Rusia, Escandinavia y América del Norte. Sin embargo, las áreas forestales más grandes, por el momento, están en los trópicos, que son el hogar de alrededor del 43 por ciento de los árboles del mundo. Sólo el 24 por ciento están en las densas regiones boreales, mientras que otro 22 por ciento existe en las zonas templadas.

Sin número exacto

Aunque no hay un número de árboles, en la Argentina se podría decir que estamos en emergencia forestal. El Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC), el organismo que produce la información científica para la ONU, señaló que "el 4,3 % de la deforestación global ocurre en la Argentina" y agregó que "la deforestación en el bosque chaqueño se ha acelerado en la última década a partir de la expansión agrícola, convirtiéndose así en la principal fuente de emisiones de carbono del norte argentino".

Según explica la Fundación Vida Silvestre Argentina (FVSA), esta situación se agrava al considerar la demanda de áreas productivas para urbanización, cultivo y fabricación de productos de madera. En Argentina, por ejemplo, se perdieron en los últimos diez años 3 millones de hectáreas por deforestación. "En Argentina en 1990 contábamos con 34,7 millones de hectáreas de bosques naturales y que hoy se redujeron a 27,11 millones. Esto implica que en 25 años perdimos el 22% de bosques del país", precisó Manuel Jaramillo,coordinador del Programa Selva Paranaense. La ley de presupuestos mínimos para la protección de bosques no detiene el decrecimiento: establece zonas rojas, donde la tala está prohibida; zonas amarillas, donde se autoriza un uso sustentable del recurso, y zonas verdes, donde se autorizan los desmontes.

"El fondo para la ley tendría que tener un presupuesto de 5.121 millones de pesos y le dan sólo 265 millones. Estas partidas, en ninguna caso, han superado el 10% de los montos definidos por la norma", agregó el experto forestal. Con los niveles de emisión de carbono actuales, se necesitan dos veces la biocapacidad mundial de bosques para absorber todas las emisiones que general el planeta.

lunes, 26 de octubre de 2015

Demencial es actual ritmo de la deforestación en el Chaco
lanacion.com.py

Más del 60% de la deforestación se registró en el departamento de Boquerón

De acuerdo con un reporte de la ONG Base de Investigaciones Sociales (BASE-IS), en el periodo analizado se desmontaron 302.592 hectáreas de bosques en el Chaco paraguayo, “de acuerdo a una sistematización que realizamos de las informaciones de la institución Guyra Paraguay”.
El Chaco paraguayo, como territorio biogeográfico está conformado por los departamentos de Alto Paraguay, Boquerón y Presidente Hayes, pero también ingresa en porciones de territorios de otros departamentos de la región Oriental del país, como Concepción, San Pedro, Cordillera, Paraguarí y Ñeembucú.
La cantidad deforestada supone que en promedio, cada mes se tumbaron 25.000 hectáreas de bosque; cada día 841 hectáreas y cada hora 35 hectáreas.
Poco más del 60% de toda esta deforestación se registró en el departamento de Boquerón, el más golpeado por el desmonte.
En una analogía, este ritmo de deforestación acabaría en solo 3 horas el Jardín Botánico de la capital paraguaya (110 hectáreas) y en solo 50 minutos el Parque Nacional Ñu Guasu, de Luque (25 hectáreas).
Para la analista Inés Francechelli hay un único actor responsable de esta realidad: las empresas ganaderas.
“Hay denuncias de deforestación históricas, como el caso de la empresa brasileña Yaguarete Porã, en el departamento de Alto Paraguay, que afecta territorios del pueblo ayoreo totobiegosode, incluso territorios donde existen grupos en aislamiento voluntario”, dijo.
La empresa habría tumbado unas 10.000 hectáreas en la zona de Puerto Casado, de acuerdo a las denuncias.
“En Boquerón los principales responsables son los colonos menonitas y nuevos propietarios extranjeros, especialmente uruguayos, brasileños, japoneses y otros”, explicó Franceschelli.
El territorio ayoreo es uno de los últimos remanentes de bosques vírgenes en el lado paraguayo del Chaco, un ecosistema único en América, compartido entre Paraguay, Argentina, Bolivia y Brasil.
Las comunidades de ayoreo, que llevan varios años denunciando esta situación han constatado en reiteradas ocasiones la presencia de varios cientos de kilómetros de vallas, operarios y tractores introducidos en sus tierras por otra empresa, la firma Itapoti, según GAT.